14.2 El inicio de un prostituto II

-¡Ese cabronazo quiere cogerte el culo y hacerte suyo! -su reacción me hizo reír.

Notaba a Alan cansado, llevaba hablando mucho rato sin descansar.

-Vamos a pasear un poco y te relajas, luego continúas con tu historia. –llegábamos al Palacio de la Opera y Alan me sujetó del brazo.

-Quiero continuar, me sienta muy bien contarte mi vida.  –apreté con ternura su cintura asintiendo.

*[Hasta la noche no tuvimos que enfrentarnos a nuestros actos, llegamos del colegio y después de merendar hicimos nuestros deberes como todos los días, sentí llegar el coche de su...

14.1 El inicio de un prostituto I

Comenzó a decirme las palabrotas que los hombres le decían a mi madre, mientras abrazaba mi cintura y mordía mi cuello.

Lunes

Para mí era inevitable, los nervios podían conmigo, sé que no debo ponerme así y que a media mañana todo habrá pasado, o eso espero, mi primer día de trabajo en la nueva empresa me estaba destrozando.

Mi madre me contemplaba preocupada aunque ya me conoce de sobra, a las siete menos cuarto cogía el coche y a las ocho estaba ante la puerta de la fábrica.

Tuve que esperar hasta las ocho y media que es la hora de la entrada del personal de ese turno.

La fábrica no detiene su activ...

13.2 Mis amigos quieren ser modelos

-Vamos a la cama Daniel. –le acompaño sin protestar, me lleva a una habitación y me deja caer en la cama, me va retirando la ropa y de vez en cuando se ríe.

Me desperecé y me estiré voluptuoso en la cama, me sentía tan cómodo entre las sábanas, totalmente desnudo, notando su frescura cuando me movía y cambiaba de lugar, lentamente volvían a mí los recuerdos de hace unas horas.

No puedo evitar que una sonrisa abra mis labios. ¿Qué habrán pensado de mi actuación?, de mi casi huida intempestiva, ahora no sabría decir si hice bien o mal, estaba contento de haber escapado y me hubiera encantado quedarme allí.

Me encontré con mi madre y nos miramos sonrie...

Y la búsqueda terminó

Esa noche quería hacer una travesura. Comencé chupando el glande cómo un dulce, no lo hice por mucho tiempo.

Publico lo que mi amigo me remite, me pide que se lo corrija, ¿y para qué?, me pregunto. Si él sabe transmitir, mejor que cualquiera, lo que siente.

Tal, cual me lo envió, salvo algún entrecomillado.

Hola Albany,

Después del: “

Muchacho tímido y sincero

” y esa mirada a mi pasado en "

El suplente de mi mejor amigo

", no he dejado de buscar eso que siempre señalo al final de mis escritos: el amor de un hombre de verdad. Y que me encuentre en esa búsqueda, hasta hoy i...

13.1 Como se rueda una escena erótica

No dejaba de moverse mostrando la perfecta conformación de su cuerpo, haciendo resaltar sus lisos abdominales que se contraían en las ocasiones que elevaba su cabeza, moviendo su cabellera para que cayera semi ocultado su rostro.

La celebración de La Braderie parece que ha finalizado, la alegría de las calles de estos dos últimos días ya no se ve, los puestos de comida y venta de chucherías y adornos han sido retirados, han desaparecido las gigantescas motos tan llamativas, y no se escucha el griterío y los escandalosos ruidos, la fiesta donde se vende todo lo que te sobra en casa había terminado.

Se nota que al estar pensando en nuestro trabajo de búsqueda de vivienda, no hemos disfrutado como debiéramos de sus fiestas, que a...

12.2 Noche de fiesta en Lille

Para mí ha sido suficiente y veo perfectamente el propósito de estos reservados, y el papel que hace tanto chico guapo en el local, son hermosos prostitutos vendiendo sus cuerpos a los clientes que pasan sus noches en el local de Lucas.

Hemos venido en el coche a Lille para ir familiarizándonos con el camino, antes habíamos desayunado previendo que igual no podíamos hacerlo al llegar, y por haber quedado a una hora muy temprana para comenzar las visitas. Aparcamos el coche y comenzamos nuestro trabajo en las dos inmobiliarias con las que habíamos quedado, después de muchas visitas no había algo que nos dejara satisfechos y decidimos que volveríamos si no encontrábamos alguna casa mejor y que cumpliera con nuestras expectativas.

Como...

12.1 El viaje hasta Béthune

Comenzó a moverse, a sudar y jadear empujando sus caderas, en un juego que me mostraba el espejo y me hacia morir de placer y gozo.

Cuando desperté Nicolás me tenía abrazado, giré mi cabeza y me encontré su mirada, se acercó y besó mi mejilla y mis labios, con cariño muerde mi barbilla.

-Esto se termina.  –suspira profundamente.

Me vuelvo hacia él, tiene el pelo revuelto, le abrazo y apoyo mi cabeza en su pecho, permanezco un rato así, escuchando los latidos de su corazón, voy acariciando su cuerpo con mi mano, pasando la yema de mis dedos por el denso vello de su estómago y llego a su miembro viril. Suelto una carcajada, có...

11.2 Y las Fiestas terminaron

Tiene un culito de machito muy varonil, pequeño, alto y redondo, con mucho vello y esos testículos gordos y cubiertos de pelos colgando y tapando en parte su polla mirándole por detrás

Anoche no me enteré de cuando llegaron mis padres, Nico me pidió que fuera yo el que le hiciera el amor otra vez, me encantó que me lo pidiera, aunque sigo con mis miedos a pesar de haberlo hecho hace unas horas, cuando vi su cara de felicidad se me fueron los temores y dormí después como un ángel entre nubes de algodones y abrazado por sus brazos. No puede pasarnos nada malo, cuando el cariño es tan tierno, cuando vivimos el uno para el otro, pero sin avasallar el terreno contrario no pueden suceder cosas...

11.1 Fiestas de verano

Sujeté sus nalgas para que no se moviera y fuera yo el que girara mis caderas y cerrara y abriera mi culo para adaptarme a tal tamaño de polla deliciosa.

Nos hemos levantado a toda prisa y dejado todo tirado, solo deseo que mi madre no se enfade, seguro que no se molestará y recogerá la habitación encantada de poder hacer algo por nosotros. Hasta hemos desayunado en un bar cercano por falta de tiempo.


Anoche nos encontramos con personas conocidas y estuvimos hasta muy tarde.  Cuando  llegamos a casa, organizamos nuestra orgía particular, ya que teníamos la casa para nosotros dos solos, a pesar del cansancio nos deseábamos...

10.2 Los padres de Nicolás

Sacó su miembro y comenzó a masturbarse arrodillado entre mis piernas, empecé a temblar mientras exhausto eyaculaba y él comenzó a venirse, cayendo nuestro semen sincronizado sobre mi vientre y mi pecho.

Nicolás miraba hacía las vidrieras de los miradores que están arriba, la cinta estaba funcionando y nuestras maletas no terminaban de aparecer, ¿se habrán perdido, extraviado como es tan frecuente? No sería tan inverosimil.

Me señala para que mire en la dirección que me indica, una señora mueve ligeramente su mano junto a un hombre que me parece más joven que ella, no me he querido poner las lentillas, ni las gafas, por motivos diferentes y no les distingo bien.

-Es mi madre, ya nos están espera...