Mírame

Durante unos segundos pensé en parar, pero era demasiado tarde, algo se apoderó de mí y empecé a masturbarme salvajemente, excitadísima al sentirme observada.

Llevaba dos semanas en casa de mis padres. Había regresado al nido, mientras buscaba otro apartamento.

Nunca me llevé mal con mis padres y la convivencia no era mala, pero cuando te acostumbras a vivir sola… también pensé que no hay nada como volver a un lugar que no ha cambiado nada, que sigue igualito a como lo dejaste, para darte cuenta de lo mucho que has cambiado tú.

Otro problema añadido era que mis padres vivían en un precioso piso dúplex a las afueras en una mini urbanización muy...

La cuñadita de mi hija

No podía evitar mirarla a hurtadillas, para luego regañarme por hacerlo. Esa chica me excitaba como nadie, sin ni siquiera pretenderlo.

Mientras metía ropa en mi bolsa de viaje, maldecía por haberme dejado convencer por mi hija, que me había llevado a su terreno con ojos lastimosos, diciéndome:

—Papi, ¿podemos quedarnos en la casita de campo el mes que viene?

—Nena, está vacía todo el año, solo me escapo algún fin de semana y una completa este mes ya que doy vacaciones en el despacho.

—Mejor, así pasamos algunos días juntos, la casa es enorme…

Total que me había convencido, haciéndome sentir culpable...

Rico negocio familiar

Me encantaba formar parte del negocio familiar, hacia solo un año que había terminado mis estudios de interiorismo y trabajaba con mi tío y mi primo, ambos arquitectos.

Me encantaba formar parte del negocio familiar, hacia solo un año que había terminado mis estudios de interiorismo y trabajaba con mi tío y mi primo, ambos arquitectos.

En el trabajo, lo llevábamos de maravilla, aunque fuera en la familia, había algún que otro roce con sus parejas.

Parte de la familia no aceptaba a la nueva pareja de mi tío, desde que dejó a su mujer por esta diez años menor, a la que por otra parte creían que estaba con él por su dinero, yo incluida.

Con la mu...

Cuando nadie nos ve

Agarró su cinturón que había dejado a mi lado en la cama, volvió a ponerme bien la venda dejándome de nuevo a oscuras y noté como pasaba el cinturón por mi cuerpo y las dos puntas la enrollaba en sus manos, luego tiró levantándome y llevándome hacia su polla dura

Tras saludar al conserje fui hacia el ascensor oyendo el repiquetear de mis tacones en el mármol del suelo. Pulsé el botón y unos minutos después abría la puerta de aquel apartamento con mi propia llave.

Esta no estaba prendida a nada, ni llavero, ni cinta, nada… solo el frio metal descansaba ahora en mi puño, la apreté con fuerza como si sentir algo en la mano aplacara el calor que recorría mis entrañas… esa sensación que sentía siempre que le esperaba. Era una mezcla de deseo, temor a que no vin...

...Porque eres mi nieta...2

Nos pilla su amigo y nos chantajea...

No doy crédito a lo que acabas de decirme. Te miro de hito en hito intentando asimilarlo. Esas dos palabras retumban en mi mente “a ti”.

-No voy a permitirlo, princesa. Me importa un comino lo que diga y a quien.

-Abu, recapacita. No voy a permitir que estés en boca de todos, ¿has pensado en tu hija?

-Claro que he pensado en ella y en este maldito pueblo cotilla.

-Abuelo, además no vamos a resistir la presión si todo esto sale a la luz.

-Ese cabrón, no quiere...

....Porque eres mi nieta...

Segunda parte de ¿por qué no? esta vez por él... Se puede leer sin el otro aunque no es lo mismo

Como explicar cómo me hace sentir esa criatura creada para el pecado, solo diré en mi defensa que nunca tuve escapatoria y que estuve condenado al fuego eterno desde el mismo instante en el que ella decidió que quería que su abuelo la follara… ¿porque qué ser humano, es capaz de decir no, cuando ante ti aparece y se ofrece el mejor de tus sueños? Lo hice con toda mi alma desde el primer instante, me perdí en el calor de su joven cuerpo, su olor, la suavidad de su piel, el calor de su sexo que me atrapó y me...

¿Por qué no?

Tú das dos pasos hacia atrás y miras mi desnudez, tus ojos de lobo recorren mi cuerpo que sigue temblando, aunque ya no tengo claro que sea de frio. -No, Claudia –dices antes de salir de la cocina- -¿Y por qué no? -grito al espacio vacio que dejas-

De nuevo parada ante esa fabulosa casa de piedra pienso en lo bonita que es, irradia calor, rutina, tranquilidad… y esta allí en ese pueblo, al final de esa calle y detrás solo el bosque y las montañas… estoy enamorada de ese lugar.

Busco bajo la piedra que me ha indicado y encuentro la llave, entro y compruebo que como era de esperar estoy sola por un buen rato. He estado varias veces allí, pero sigue maravillándome el alto techo central, la escalera de madera que sube al único piso, me siento en...

El desconocido que me folló III

Alguien bajó la escalera y se metió en los baños mientras seguía arremetiendo una y otra vez perforando mi coñito. Arriba mi padre contaba hazañas y su mujer y mi madre preguntaban sin sospechar que nosotros estábamos follando como locos, sin importarnos nada que no fuera satisfacer el deseo que nos consumía.

Él volvió a tumbarse a mi lado en el jacuzzi, durante un rato nos relajamos sin hablar solo apaciguando nuestros cuerpos.

Unos minutos después cogí un gel aromático de un cesto que habíamos tirado en pleno éxtasis y tras enjabonarme hice lo mismo con él que se limitaba a mirarme y sonreírme agradecido.

Salí del jacuzzi y me sequé mientras el salía, luego se secó y yo fui hacia la cama, tiré la toalla al suelo y me lancé sobre la mullida cama.

-Pareces una chiquilla… eres una ch...

El desconocido que me folló II

Mi euforia se esfumó de un plumazo cuando se levantó el hombre sentado en el sofá de mis padres...

Mi euforia se esfumó de un plumazo cuando se levantó el hombre sentado en el sofá de mis padres. En ese instante sus ojos de sorpresa nada tenían que ver con el fuego que desprendían tan solo unas horas antes cuando me movía sobre él, dejando que su polla me llenara por completo.

-Él es Ramiro; Ramiro ella es mi hija Dani

-Vaya todos estos meses creí que Dani era un chico –dijo arrastrando las palabras aun incrédulo-

-Es diminutivo de Daniela, es chica –dijo mama-

-Ya...

El desconocido que me folló

Un desconocido, una playa salvaje... y dimos rienda suelta a nuestra pasión

Hacía un calor infernal esa noche, me di cuenta nada más bajar del coche en el aeropuerto. Estiré las piernas entumecidas andando un poco alrededor del taxi de mi padre. Durante el verano le ayudaba haciendo unas horas por las mañanas para que el pudiera alargar la jornada, casi siempre viajes desde ese aeropuerto al pueblo costero de al lado donde vivíamos; el trabajo me permitía ganar un dinerillo; normalmente hacía las mañanas pero ese día mi padre tenía unas cosas que hacer e hice la noche.

Ab...