Con quien menos lo esperaba II
Segunda parte también con unos arreglillos y vuelta subir para quien no la hay leído.
Cuando desperté, me dolía todo y era tardísimo, si no me daba prisa llegaría tarde al trabajo. Mi mesa estaba en la primera planta y los despachos de dirección en la segunda, por lo que no vi a mi hermano en toda la mañana. Al mediodía, estaba en el restaurante en el que solíamos comer con un par de compañeras, entonces le vi entrar con un grupo de hombres igual de trajeados que él y se sentaron en una mesa apartada, desde donde estaba podía verles hablar y recordé sus caricias, su mirada, sus manos recorri...