El Semental de las Mayén (09)

La tía, prácticamente, empieza a ofrecerse a su sobrino.

El Semental de las Mayén

IX

El tiempo continuó su marcha, y nuestro plan siguió el curso planeado, ocurrió lo que esperábamos con tantas ansias. Rosario continuó acercándose a Beto, a tratar de llevarlo por caminos donde el tendría que descubrir por si mismo a sus tías, a su abuela y a su madre, como seres bellos y deseables.

Alberto fue tomando más soltura y libertad para vernos, poco a poco dejó de avergonzarse cuando nos pescaba en posiciones indecorosas, y cada vez más nos...

El Semental de las Mayén (08)

Nos hemos convertido en un cúmulo ambulante de tentaciones para mi hijo, pero aun no nos atrevemos a más. Pero entre nosotras si...

El Semental de las Mayén

VIII

Rápidamente llegó el siguiente día. Ya sabíamos lo que haríamos ahora. Nuestros hijos se irían al colegio en la mañana, así que tendríamos como unas 4 horas solo para nosotras. Rosario estaba muy ansiosa por comenzar. Como no había participado la primera vez, se moría de ganas por estar en esta. Nos fuimos al cuarto de mamá y allí iniciamos.

Nos desvestimos como la vez anterior, solo que esta vez con más soltura. Rápidamente quedamos en bolas, mirá...

El Semental de las Mayén (07)

Rosario empieza a encaminar poco a poco a su sobrino dentro de los placeres del sexo.

El Semental de las Mayén

VII

La tarde pasó como si nada, solo las miradas cómplices de todas nosotras podían delatar que algo había pasado, pero qué, nada, nadie podía imaginarse lo que habíamos hecho.

El reloj dio las 6:30 de la tarde, con lo que llegaba la cena. Luego dieron las 7, y las 8, y por último las 9. A esa hora acostumbrábamos acostar a nuestros hijos, bueno, los que estuvieran. Nosotras nos fuimos después a la cocina como siempre, a platicar un ratito antes de irno...

El Semental de las Mayén (06)

Se ha decidido, Alberto, a sus 13 años, tiene que ser el amor y señor de su casa. Y mientras tanto, ninguna de sus futuras mujeres pierde el tiempo.

El Semental de las Mayén

VI

Comenzamos a planear cómo íbamos para inducir a Beto a tener relaciones con nosotras, y cómo haríamos para hacerlo inmensamente feliz. Eso era mi prioridad, no me metería a nada, ni permitiría que Beto entrara, en lo que no estuviera plenamente segura de que a el lo iba a ser muy feliz. Y hasta la fecha es feliz como una lombriz. Mamá tomó la palabra:

Yo creo que tú deberías ser la que lo inicia en esto

¡¿Yo?!… – pregunté alarmada.

Si tu...

El Semental de las Mayén (05)

Qué ocurre cuando una madre acepta que su hijo sea convertido en el hombre de la familia? Qué lleva a una mujer a hacer eso?

El Semental de las Mayén

V

Ese día me quería morir. Mamá y mis hermanas estaban muy preocupadas pues solo una vez me habían visto así, justo el día en que encontré una nota en mi casa, diciéndome Flavio que se fugaba con quién putas sabe, y que se llevaba a mi nena Silvita. Y ahora me sentía tan mal. Por un lado, la soledad y la vida triste mía me habían golpeado las dos juntas. Y por el otro, me sentía la peor de las madres, la más sucia. Pensaba ¿Qué lo pasa a mi familia, que toda...

El Semental de las Mayén (04)

Si por la tarde había armado un pleito terrible contra sus hermanas por lo que hicieron, cómo era posible que ahora la madre deseara a su propio hijo con tanta desesperación?

El Semental de las Mayén

IV

Silvia… yo se que esto te puso mal… yo se que esto parece una locura, un degenera, la cosa más sucia del mundo, pero te pido que me escuchés

¡¿Y qué te voy a escuchar?! ¡NO tengo nada que escucharte!- le contesté gritando de furia a Rosario.

Como recordarán, sorprendía a mi madre y a mi hermana Blanca masturbándose mientras veían a mi hijo Alberto haciéndolo, allá en el sitio. Yo estaba que sacaba chispas, indignadísima. ¿Cómo era posible...

El Semental de las Mayén (03)

El sobrino masturbándose, la tía viéndolo tras unos matorrales... masturbándose también. Y la madre que no entiende lo que está pasando.

El Semental de las Mayén

III

La mañana llegó, y entre mi madre y Rosario solo había silencio, ninguna de las 2 se atrevía a decir nada. "Buenos días", "buen provecho", etc., solo esto se decían la una a la otra. Mientras, Beto se extrañaba del silencio que reinaba en la casa, solo roto en la mañana cuando Ingrid se fue a la escuela, y cuando su abuela o su tía le ofrecían algo de tomar. Le extrañaba especialmente el silencio de la bullanguera de Rosario.

La mañana continuó su m...

El Semental de las Mayén (02)

La soledad y la tristeza forman una mala pareja, y son de las peores consejeras que hay.

El Semental de las Mayén

II

Mamá se levantó al día siguiente como normalmente lo hacía. Preparó el desayuno y limpió la casa. Rosario la ayudó, como normalmente hacía. Lo único anormal de la situación era el silencio extremo que guardaban las 2 mujeres. Ninguna hablaba, ninguna pronunciaba palabra, solo silencio. Ingrid, mi linda sobrinita, hija de Rosario, era la única que andaba alegremente por allí, haciendo ruido animadamente. Ella tenía unos 6 años en esos días, y se preparaba ...

El Semental de las Mayén (01)

Hola, les traigo aquí la historia de como fue que Beto se convirtió en el amante, novio, marido y amo de todas las mujeres de su familia, en el Semental de las Mayén. Qué la disfruten.

El Semental de las Mayén

I

Hola otra vez, aquí les habla Laura Ovalle de Estrada, y ahora de Mayén también. Ya habrán leído mi serie anterior, "Alberto, el Semental que me hizo su Yegua", hablándoles de cómo fue que terminé siendo esposa, a pesar de estar felizmente casada con Kike, del que fuera mi mejor amigo de toda la vida, Alberto. Pues bien, ahora que ya saben eso, me imagino que se preguntarán como fue que el llegó a ser el "Semental de las Mayén". Pues precisamente de eso trata...

Alberto, el Semental que me hizo su Yegua (04)

Ingrid, la prima menor de Beto, me cuenta cómo fue que pescó a Silvia e Irma teniendo sexo con el. Esto es un trío de amor filial.

Alberto, el Semental que me hizo su Yegua 04

Ingrid entró a mi habitación, cerrando la puerta tras de si. Se había convertido en una mujer hermosa, muy bella, yo la conocía cuando tenía 11 o 12 años, y desde entonces se perfilaba como una adolescente preciosa. Su madre, Rosario, la tuvo luego engañar a su ex esposo, quien la tenía completamente abandonada y no quería tener hijos nunca, con un turista japonés. Así que la niña nación con rasgos orientales, pero unos ojos azules preciosos y el...