El Nacimiento de Kika
Nunca me imaginé que mi propio esposo puediera ser una mujer tan hermosa, encontré a una nueva amiga.
El Nacimiento de Kika
¡Si! ¡Si mi amor, así! ¡¡¡¡AAAHHH, DIOOOOSSSS MÍOOOOOOO!!!! gemí cuando mi tercer orgasmo de la noche tocaba a mis puertas.
Gozá amor, gozá me decía Kike mientras me penetraba a gran velocidad.
A pesar de nuestra ya, más o menos, extensa experiencia en los intercambios, nunca voy a dejar de gozar hacer el amor con mi marido. El siempre sabe bien donde tocar, como y cuando, pata hacerme estallar en deliciosas oleadas de placer. Soy bastante multio...