Viendo y hablando se puede acabar follando
...Cuando una polla salía del coño, la otra entraba en el culo, y viceversa.La vagina se abría y se cerraba al salir la polla, y cuando salía del culo se abría y se cerraba el ojete, era cómo si estuviese apunto de correrse continuamente.
Faustino era un hombre maduro al que hacía años había dejado su esposa Angelina, una mujer 20 años más joven que él. Vendiera todas sus posesiones en el pueblo -menos una casa- y se fuera a la ciudad a vivir con Andrés, su hijo, un abogado de 28 años, alto cómo el, 1.79, moreno cómo él, y trabajador cómo él.
Estaban delante de un ordenador en el despacho que tenía Andrés en su ático.
-¿Ve, padre? Aquí se toca para poner la cámara. Aquí para poner la voz...
-¿Y cómo dices que se llama esto?...