¡Adiós hermano, bienvenido Leonardo!
Mi hermano obtiene una beca para estudiar en el extrangero, y el amigo que deja en su lugar habrá de desvirgarme.
¡Adiós hermano, bienvenido Leonardo!
Luego de abrazar a mis padres, mi hermano se paró frente a mí como esperando que yo también me despidiera de él con la misma efusividad, pero lo rechacé de un empujón. Más que una tristeza, el que Marco estuviera a punto de irse del país por unos años representaba para mí un alivio.
Él no sólo es el mayor, sino el mejor en todo. Siempre he estado a su sombra y mis pocas habilidades se aprecian aún más pobres comparadas con las suyas, extraña combinación...