Miradas (2)

El juego de miradas entre Jorgito y su madre les lleva un poco más lejos. La calentura de Felicia hace que su marido e lo pase estupendamente

Oliendo sus propias bragas, con su olor y el del semen de su hijo, Felicia de sintió excitada, como no recordaba haberlo estado. Su coñito empezó a chorrear. Aquello era tan morboso. Se imaginaba a Jorgito, con su polla en la mano, oliendo sus bragas.

¿Como lo haría? ¿Las olería mientras se masturbaba y luego se correría sobre ellas? ¿O las cogería con la mano y se pajearía?

Las bragas que llevaba puestas ahora estaban más mojadas que las que tenía en las manos. Con la mano que no sostenía...

Miradas (1)

Un adolescente descubre en su jamona madre el blanco de sus masturbaciones

Como todo adolescente que entra en la pubertad y es atacado pos las hormonas, Jorgito empezó a sentir cosas que eran nuevas para él. Ya las niñas no eran esas tontas que no servían para nada. Ahora las veía con otros ojos.

Pero se dio cuenta de que los cuerpos de las chicas de su edad no le atraían tanto como los cuerpos y las mujeres mayores. Y en un pueblo pequeño con el suyo, no había mucho en donde elegir.

Descubrió que muchas mañanas se levantaba con los calzoncillos manchados de un l...

La niña buena (11)

Diana se lo pasa en grande con el tipo rudo del bar. ana se da cuenta de lo mal que se ha portado y pone remedio

La mirada de aquel tipo duro y basto, hizo que los pezones de Diana se pusieran duros. Cuando él le puso la mano en la rodilla, se estremeció. -¿Tomas algo, preciosa? -Un vaso de leche. -Jajaja. Me parece que aquí no hay leche, guapa. Diana le miró directamente a los ojos. -¿Seguro que no hay? -Ummmm, me parece que eres un poco zorrón. -Jajaja. Tienes buen ojo para las mujeres. -¿No pretenderás cobrarme, verdad? Ella se acercó a su oreja. Olió la colonia barata que el tipo llevaba, que no era ca...

La niña buena (10)

Ana empieza su camino sin retorno hacia la sumisión.

Los pezones de Ana se marcaban como dos duros botones en la tela del precioso vestido. Su agitada respiración hacía que sus tetas subieran y bajaran al ritmo de sus pulmones.

-Joder, Ana. Pero que buena estás.

-¿De verdad soy guapa?

-Eres preciosa.

Se acercó a ella y la abrazó, con fuerza. Le besó el cuello, mientras llevaba sus manos a su culo, sobándolo y apretándolo contra él. Ana sentía contra su barriga la dura polla de Ramón. El pensar que aquella enorme barra estaría dent...

La niña buena (9)

Ana sucumbe a la tentación y vuelve a ver a Ramón. Le beata se va para siempre y nacerá una nueva mujer

Durante la cena Diana no dejaba de mover sus muslos, haciendo que las bolas frotaran y frotaran las paredes de su encharcado coñito. Valentín se dio cuenta de que varias veces cerraba los ojos y los puños, poniendo los nudillos blancos. Aquella zorrita no dejaba de correrse.

Ana, en silencio, comía sin darse cuenta de nada.

-¿Es lindo el vestido que habéis comprado?

-Oh sí, mami. Es muy bonito. ¿Verdad papi?

-Precioso. Le queda muy bien.

-¿Me lo enseñas?

-Cl..claro... ...

¿Por qué no me quieres? (8 y final)

¿ Conseguirá la Peque su máximo deseo ? ¿La amará Jesús? Las respuesta la pondrá cada lector

Lisa miró a la Peque. Luego a Jesús..¿Su hermana? ¿Era Blanca su hermana?

-¿Qué significa esto? ¿Qué pasa Blanca?

-No me llamo Blanca. Me llamo María. Y soy la hermana de Jesús.

Las piernas de Lisa le flaquearon y tuvo que sentarse.

-Peque! ¿Cómo has podido hacer algo así? - le gritó su hermano.

La Peque estaba muy tranquila.

-¿Que cómo? Lo hice por amor. Lo hice porque sin ti no puedo vivir. Lo hice porque te amo y es lo único que me importa.

Lisa seguía sin e...

¿Por qué no me quieres? (7)

Se hacerca el final. Jesús es puesto contra la espada y la pared por Lisa. De su desición dependerá la felicidad de todos

La Peque no volvió a buscar a su hermano. Lo seguía amando, lo seguía deseando, pero no soportaba que la rechazara, así que optó por no acercarse a él.

Por las noches, en la oscuridad de su habitación recordaba como la besa, como la acariciaba. Lo tenía muy cerca, a pocos pasos, pero no la amaba. Amaba a Lisa. Luchaba por no levantarse e ir en su busca. Sabía que la volvería a rechazar.

Y por eso, sola, se acariciaba. Cerraba los ojos e imaginaba que sus dedos eran los dedos de él, la leng...

La niña buena (8)

Ramón consigue por fin meter todo su aparato en una mujer.

Ramón le dio la vuelta ya la abrazó desde atrás, llevando sus manos a sus tetas ya apretándolas con fuerza. Le restregó por el culo su dura polla. Esa mañana se había corrido en la cara de la madre y ahora se iba a follar a la hija.

La llevó contra la pared, aplastándola contra ella.

-¿A quién sales tan puta? ¿A tu madre?

-Jajaja. Noooooo. Ella es una santurrona. Seguro que ni le ha visto la polla a mi padre.

"Si tú supieras", pensó Ramón. Los ojos de su madre cuando lo miró con...

¿Por qué no me quieres? (6)

El mundo de la Peque está a punto de desmoronarse al enterarse del nuevo amor de su hermano. Pero la Peque no se da por vencida

Jesús estaba nervioso. Lisa, también. Juntaron sus cuerpos y se besaron con pasión. Las manos de Jesús recorrieron la espalda de la chica hasta llegar a su duro culito, que acarició con mimo. Lisa no dejaba de restregarse contra la dureza que sentía contra su cuerpo.

Se desnudaron el uno al otro. Jesús admiró la belleza de ella. Su piel blanca, muy blanca, en contraste con su negro pelo, en contraste con su negro pubis. Lisa tenía clavados sus ojos en la polla de Jesús, que la miraba, desafiante...

La niña buena (7)

Qué es más fuerte? ¿La religión o el morbo? Cae la beata

Por la mañana, Valentín se levantó con la polla dura. Se levantó y se dirigió al cuarto de Diana. Al abrir la puerta, se la encontró desnuda, arrodillada en el suelo.

No hubo palabras. Valentín se sacó la polla y se acercó a su hija, que abrió la boca. Él quedó frente a ella, le levantó la cara y le metió la polla, que resbaló dentro la la boca, centímetro a centímetro, hasta que la nariz de Diana chocó con el pubis de su padre. Se la empezó a follar por la boca, bien fuerte. La polla de Valentí...