Mas cerca del cielo 4
Había cosas que las unían más que las montañas
-Te necesito a ti, por favor Lili, no me dejes así – me imploró, cómo la iba dejar si estaba deseando satisfacerla, y aunque nunca había hecho eso tampoco es que viviera en una nube, quizá no lo haría como quien estuviera acostumbrada, pero empeño iba a poner.
Empecé disfrutando sus besos, seguí por su cuello, y llegué a esas dos cumbres de marfil ofrecidas a la voracidad de mi boca, eran exquisitas, sentía el latido de su corazón marcando el ritmo de mis chupones, los gemidos me guiaban y me pedían q...