Me hicieron creer que era afeminado. (17)

Por fin llegaban los días festivos y mi ilusión era volver a ver a mi familia, también tenía muchas ganas de ver a Celia y sus gemelas y a Ana, la mujer pelirroja del médico, estos días prometían ser agitados.

Los días pasaban y las relaciones con Sonia eran frías, notaba que quería acercarse a mí pero estaba muy dolido, quizá me había hecho demasiadas ilusiones con ella y el día que nos íbamos a separar por toda despedida le dije:

  • Dale recuerdos a Daniel de mi parte, por favor.

La chica se volvió llorando y se marchó, seguro que esperaba cualquier despedida menos esa pero yo estaba muy decepcionado, por todo lo que había hecho por ella con su novio y ahora se iba a encontrar con él, algo dent...

Me hicieron creer que era afeminado. (16)

Se acercaba un fin de semana largo y me propuse ir al pueblo para visitar a mi familia, tenía otro motivo, habían nacido mis “sobrinas” gemelas y quería conocerlas, en Madrid quise dejar las cosas medio “hilvanadas” pero

Después de la clase en la que probé la ropa a Adela y en la que le metí la polla en presencia de todas, me esperaba una buena reprimenda, en realidad me había pasado bastante envalentonado por todas las chicas y queriendo darle una “satisfacción” a la modelo y por su provocación me lancé a “tumba abierta” .  Rosa la profesora se había ido un rato antes percibiendo que aquello se calentaba demasiado y no quiso ser testigo para no ponerse en contra de todas las chicas pero en la siguiente clase me l...

Me hicieron creer que era afeminado. (15)

En la Academia de Corte era el alumno más aplicado y eso tenía sus ventajas, mis compañeras me apoyaban y alguna incluso me había cogido afecto, por lo demás diría que “progresaba adecuadamente”

Ya como norma todos los días al salir de clase esperaba a Sonia, le acompañaba a su casa o mejor dicho hasta cerca de su casa para evitar las consecuencias con su estricta tía, notaba a la chica cada día más agobiada y no era por la clase, Sonia cumplía más o menos aunque sabía que no estaba por su voluntad pero al salir la veía apagarse, cada vez hablaba menos y aunque intentaba animarle de todas las maneras no lo conseguía.

  • ***Sonia, perdona que me inmiscuya, sé que dirás que no me importa pero me...

Me hicieron creer que era afeminado. (14)

Ya en mi casa madrileña iba adaptándome a la vida de la ciudad e intentaba integrarme en el barrio, por lo pronto ya había hecho amistades o conocidos y en la Academia, tras un mal comienzo, empecé a coger el ritmo.

En la clase siguiente mis compañeras se dedicaron a hacer el pantalón a medida que les había mandado la profesora como ejercicio, entre ellas murmuraban y me miraban de vez en cuando.  Ese día también había sido el primero en llegar, Rosa me miró con poca simpatía y me dio unos buenos días más fríos que la mañana, Sonia seguía en su rincón y no hablaba más que cuando le preguntaban a ella directamente, que eran muy pocas veces, yo me cuidaba mucho en no darle motivos a la Profesora para que me tomara manía...

Me hicieron creer que era afeminado. (13)

Ahora estaba donde quería aunque totalmente desorientado y con un sentimiento de impotencia que me daban ganas de llorar pero, de momento, me dio una oleada de coraje que me llenó de vitalidad.

Desde la estación a mi casa tuve que preguntar por el Metro y allí con otro plano me acerqué todo lo que pude a mi nuevo barrio, aún era pronto para comer y callejeé un rato, fui observando las tiendas, los bares y todo lo que me podía ser útil en cualquier momento, en un quiosco de prensa compré una revista de moda, lo hice por impulso pues no pensaba que iba a llegar a estos niveles pero por lo menos conocería las nuevas tendencias.

Al llegar a mi casa me dio un bajón de moral, el portal, el ascenso...

Me hicieron creer que era afeminado. (12)

Ya me había decidido y estaba preparando los últimos detalles, no sabía lo que me iba a encontrar en la gran ciudad y con mi inexperiencia mucho menos pero estaba ilusionado y todos me apoyaban, por fin me fui a Madrid.

Me levanté tarde, el día anterior había sido muy agitado en todos los aspectos, en emociones y en casa del médico y en mi cama, me di un tiempo mirando a mi alrededor, tendría que trasladar todo aquello que me era imprescindible, sobre todo la máquina de coser, los patrones y cajas con hilos etc.

Miré el calendario y ya estaba prácticamente acabado todo, los encargos estaban anotados meticulosamente con las medidas y demás detalles, en un cajón tenía todo ordenado, mi madre se maravillaba por lo orden...

Me hicieron creer que era afeminado. (11)

Mi vida había llegado a un punto donde debía decidir mi futuro y yo tenía ambiciones, me costó pero me lancé al vacio.

Dentro de mi cabeza rondaban un montón de ideas, el yin y el yan luchaban por qué dirección tomar y me tuve que sentar en un banco que había en la plazoleta de la iglesia, había un sólo árbol y debajo de su sombra intenté serenarme antes de ir a casa, no había nadie por las calles y eso me vino bien.  En la balanza estaba poniendo las ventajas que se me ofrecían, eran magnificas y además estaban al alcance de mi mano, quizás si las dejaba pasar ya no volverían a presentarse, por otra parte estaba mi familia...

Me hicieron creer que era afeminado. (10)

Ya iba teniendo conciencia de mis habilidades y ya podía devolver las atenciones que había recibido desinteresadamente, los pedidos llegaban encadenados y todos estábamos contentos pero se me presentaba un reto, debía tomar mis decisiones y además hacerme valer como hombre.

Por la tarde llamé a doña Francisca y me dijo que no iba a estar en casa, tenía una reunión extraordinaria en la iglesia con las cofrades de la patrona y me confesó que estaban todas revolucionadas por los cambios que habían notado en muchas cosas y me prometió que me contaría los chismes y rumores que corrían por allí y de paso me haría publicidad gratuita.

Al no tener nada que hacer esa tarde llamé a la señora Merche, le dije que ya tenía su vestido listo y si le venía bien que fuera a su casa, esto...

Me hicieron creer que era afeminado. (9)

Tuve que apremiar el trabajo para cumplir con todas, algunas me dieron sorpresas y a otras se las di yo pero en general estaba muy satisfecho.

Por la tarde me dediqué a ir adelantando el trabajo, el vestido para Cintia ya estaba para prueba y el de su madre Elvira también, en cualquier momento las llamaría para ir a su casa.   En la cena todos estábamos contentos, mi tía había hecho una cena especial en parte porque se vio animada al ver que sus hijas colaboraban en todo, le ayudaban en la cocina y lo más importante las notas en el instituto se iban superando notablemente, mi madre también estaba contenta había cambiado bastante, curiosamente desd...

Me hicieron creer que era afeminado. (8)

Le demostré a mi abuela de que iba aprendiendo aunque aún iba a recibir muchas sorpresas, pero como la familia

Me levanté temprano, tenía el trabajo atrasado y quería ponerme al día con el encargo de la sotana me había quedado rezagado, ya prácticamente tenía acabado el vestido de Merche pero no quería demostrarle que quería volver demasiado pronto y lo dejé colgado en la percha, el de la madre de Cintia también estaba adelantado y el de su hija preñada un poco más atrasado por lo que quería llevarlos los dos juntos.

Me encontré en un momento en que no tenía demasiada urgencia por ninguno hasta que me acordé d...