La inyección

Azotaina con la zapatilla Madre-hijo. Las desobediencias tienen conseuencias, y sin haberlo deseado he hecho un pareado.

Hace ya unos cuantos años, era más o menos habitual que el médico de cabecera mandara unas inyecciones para curar los resfriados más o menos severos, después iba el practicante a casa, y te ponía las temidas y dolorosísimas inyecciones.

Esta es una historia real de la cual fui testigo indirecto, y que paso a contar en primea persona, como si fuera el chaval damnificado.

-Que le pongan estas dos inyecciones si no quiere que el niño coja una buena bronquitis, aquí tiene la receta.

-Muy bien...

Mi suegra , mi mujer y yo.

Triángulo formado por un joven matrimonio y la atractiva y pervertida madre de ella. Sexo, azotes, morbo...

  • Me parece  buena idea que viváis en casa estos meses hasta que os den la vuestra, así podréis ahorrar un buen dinero, y yo desde luego no os voy a cobrar nada de alquiler ni de comida, así que os podésis quedar en mi casa el tiempo que queráis, pero recuerda, en casa hay unas reglas, y si no se cumplen hay que atenerse a las conscuencias.

-Pero mamá!! ¿ quieres décir que...?

-Sabes muy bien lo que quiero decir.

-Mamá por favor! que me pegues a mí tiene un pase, al fin y al cabo, soy tu h...

La mascarilla

Relato de azotes y sexo desenfrenado dentro de un matrimonio normal.

Cuando entré a la farmacia me dí cuenta que me había olvidado la mascarilla en casa. Mi mujer se iba a poner hecha un basilisco, le había cogido un miedo tremendo al dichoso virus, y nos llevaba a todos en casa más rectos que velas. Tanto nuestros hijos como yo nos teniamos que lavar las manos después de hacer cualquier cosa que ella considerara peligrosa, y sobre todo después de salir de casa (SIEMPRE CON MASCARILLA), teniamos que hacernos una perfecta desifección.

Me compraría unas mascarillas en la...

María. Una rara historia de azotes (4)

Triángulo donde azotes ,sexo, sumisión y dominación se dan la mano.

Un sábado por la mañana María recibió una llamada telefónica en su casa, era su amiga Susana, ambas vivían en el mismo edificio.

-Hola María, puedes venir a mi casa?

-Claro, pasa algo?

-No, nada, sólo que me gustaría que vinieras, y si puede ser ahora mismo.

-Ahora voy para allá.

-Muy bien, gracias, hasta ahora.

María se quedó sentada junto al teléfono pensando, le pareció muy extraña la petición que acababa de hacerle su amiga, era raro hasta su tono.

María y Susan...

Por meterte donde no te llemaban

Relato tomado de la red y adaptado. Una madura y atractiva vecina me da mi merecido.

La jornada laboral había sido demasiado estresante, demasiado cargada, y lo único que deseaba era llegar a casa para tomarme una cerveza fresquita sentado en mi sofá viendo la tele para por fin deshacerme del cabreo que llevaba en el cuerpo. Ya en el coche de camino a casa me tuve que tragar un atasco impresionante, no veía la hora de llegar. Por fin aparque el coche y me dirigí hacia el portal con la boca seca pensando en esa cerveza que debía estar esperándome fría en la nevera. Había unos chicos jugando...

Femdonia. Pepi enseña a su hija (2)

Mi "hijastra" me azota y mi Ama me folla. Azotes, zapatillazos,sexo, dominación...

La zapatilla cayó inmisesicorde desde el principio sobre el culo del pobre Juan, Nadia subía el brazo más que su madre cuando azotaba, los zapatillazos eran más espaciados, y seguramente por ello más duros, alternaba una nalga y otra con una precisión matemática, y de vez en cuando caía algún que otro zapatillazo en los muslos que hacían aullar literalmente a su hermano, solo se oían, quejidos y los sonidos que producía aquella zapatilla sobre la piel.

Tras varios minutos de castigo, el llanto y los a...

Femdonia. Pepi enseña a su hija

Relato de azotes en familia, disciplina doméstica con la zapatilla de casa como reina absoluta.

Pocas semanas después de pasar aquel maravilloso puente en la casa rural volvimos a pasar un fin de semana juntos, ya que Nadia había venido a pasar un fin de semana a casa desde la universidad.

Quiso la casulidad que Juan trajó una nota bajísima en Matemáticas, que era su auténtico quebradero de cabeza, y cuando esperaba una buena paliza de su madre al llegar a casa, vió que estaba su hermana y pensó que quizá aquello atenuaría la azotaina de alguna de manera, y aunque no se puede hablar de atenuar,...

Nana y la escuela.

Inclasificable relato entre hermanos

Juan estaba realmente preocupado con la nota que le había dado su profesora y tutora, en ella se instaba a su hermana, y tutora, que fuera al colegio para una reunión urgente. No daba más explicaciones, ni ningún motivo concreto.

  • ¿Porque te ha dado la señorita Mari Carmen la nota para tu hermana?

  • No tengo ni idea, pero maldita la gracia que me hace joder, no sabes como va a poner...

  • ¿Te va a pegar?

  • No creo que eso te importe mucho. Dijo Juan visiblemente molesto con su amigo....

Nana y la vara.

Relato de azotainas hermana-hermano, y algo más.

-Madre mía!!!! está ya casi de noche, me tengo que ir, adiós.

Juan salió como alma que lleva el diablo de casa de uno de sus amigos donde se le pasó la tarde en un santiamén entre juegos y risas propios de su edad ;vivía con su hermana y su cuñado en una casa a las afueras del pueblo, donde el marido de su hermana tenía una carpintería, y mientras corría iba pensando en voz alta.

-Me cago en tó que paliza me va a pegar!!!, ¿pero cómo se me ha hecho tan tarde?, madre mía y tampoco le he echado de...

María . Una rara historia de azotes (3)

Placer familiar sin salir de casa.

A los pocos días del fogosísimo encuentro entre Rosasrio y María en casa de la primera, María abordó a Susana cuando ambas iban de vuelta a casa.

-¿Se puede saber que te pasa?¿ Hasta cuando piensas estar así?

-No me pasa nada María, lo que me pasa es que siento vergüenza por lo que viste el otro día en mi casa, no puedo evitarlo, ni siquiera te puedo mirar a la cara, se me cae la cara de vergüenza.

María se sorprendió al oir la cofesión de su amiga, la pobre encima de las palizas que le pe...