Diario de un Consentidor (11)
Esta es una historia de deseos, emociones, placeres, dudas, decisiones y pensamientos, es la historia del camino que nos llevó a Carmen, mi mujer, y a mí a lanzarnos a vivir las fantasías inconfesables que sin saberlo compartíamos en silencio cada vez que hacíamos el amor; Esta no es una historia de penetraciones y orgasmos, aunque también lo es; Así que si tu, lector que has llegado hasta aquí, buscas un desahogo rápido de tus pulsiones te recomiendo que abandones este texto y busques algo mas inmediato.
Media hora más tarde seguíamos sin noticias de Carlos, no habíamos vuelto a hacer ninguna alusión al tema, ambos leíamos en uno de los salones del hotel. Carmen me sacó de mi lectura cuando dijo.
"Bueno, casi mejor así, una preocupación menos" aquel comentario aislado la delataba, oculta tras su papel de lectora concentrada bullía una mujer ansiosa por volver a sentir y temerosa de dejarse llevar. La miré y le sonreí.
"Nos organizamos por nuestra cuenta, dentro de un rato nos vamos...