Adicto al sexo (Parte siete).

Séptima parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Mi relación con Marta duró algo más de año y medio hasta que a su marido le ascendieron y le trasladaron. Como ella tuvo que quedarse para poder vender la vivienda en la que habían residido, pudimos mantener contactos sexuales mucho más frecuentes en los que me prodigué en metérsela por vía vaginal con el propósito de, como ella quería, intentar preñarla aprovechando que había dejado de tomar anticonceptivos para poder “cargar el mochuelo” a su marido con el que retozaba los fines de semana que eran los per...

Adicto al sexo (Parte seis).

Sexta parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Al comienzo del verano y pocos meses después de mi ruptura con la joven, falleció mi padre lo que me obligó a abandonar los estudios para ponerme a trabajar al surgirme la oportunidad de ocupar el puesto que mi progenitor había dejado vacante mientras que, al ser el hijo menor y estar soltero, me veía obligado a continuar viviendo con mi madre, una hembra de movilidad limitada a cuenta de su obesidad, con un carácter fuerte y que se había acostumbrado a que todos los que andábamos a su alrededor hiciéramos...

Adicto al sexo (Parte cinco).

Quinta parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

A pesar de que Sandra pretendía que no perdiéramos demasiado tiempo durante el transcurso de nuestras sesiones sexuales conseguí que, entre polvo y polvo, accediera a darme una tregua para recuperarme lo que solíamos aprovechar para fumar un cigarro, con lo que adquirí el vicio, reponer líquidos bebiendo agua, hablar y sobre todo, besarnos en la boca antes de retomar nuestra actividad sexual ocupándome, durante unos minutos, de sobarla, apretarla y mamarla las tetas sin olvidarme de lamerla y pellizcarla su...

Mi inolvidable tarde con una modelo (Parte once).

Undécima y última parte de la penúltima historia que he escrito. Espero que os haya gustado y la hayais disfrutado.

Cuándo reaccioné me levanté, me limpié con el mismo pañuelo que había utilizado ella que luego deposité en una papelera, me vestí, recogí el sujetador y el tanga que guardé en los bolsillos de mi americana y tras localizar un taxi, en esta ocasión sin el menor problema, regresé a mi hotel. Al llegar me di cuenta de que lo único que sabía que aquella joven era su nombre pero me encaminé a la recepción para preguntar si se estaba celebrando algún desfile de modelos a lo que me contestaron que aquella misma ta...

Adicto al sexo (Parte cuatro).

Cuarta parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Pocas semanas después empecé a añorar la actividad sexual que había estado desarrollando con Azucena, Casilda, Mari Cruz y Rebeca y como cada día mi deseo sexual se incrementaba, cometí el tremendo error de pedir y por escrito, a Ana Isabel ( Anabel ), una vecina de mi edad, el mantener relaciones sexuales frecuentes y regulares después de que, durante un año, se hubiera convertido en una integrante más del grupo con el que jugaba en la calle periodo en el que mantuve varios encuentros sexuales a sol...

Adicto al sexo (Parte tres).

Tercera parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Mientras esto sucedía, seguí manteniendo contactos sexuales periódicos con mi prima, tanto en solitario como acompañados por Fernando José, a pesar de que Jimena estaba convencida de que alguna otra “titi” se estaba encargando de vaciarme los huevos ya que, según decía, mi rendimiento sexual no era tan satisfactorio como unos meses antes. Cuándo Jimena, a pesar de que no contrajo matrimonio hasta que estuvo próxima a cumplir cuarenta años, comenzó a tontear con varones de su edad se olvidó de nosotros no si...

Mi inolvidable tarde con una modelo (Parte diez).

Décima y penúltima parte de mi penúltima historia. Espero que os guste y la disfrutéis.

Cuándo se la saqué la hice ponerse a cuatro patas para poder volver a metérsela vaginalmente y tirármela intercalando movimientos rápidos con otros sumamente lentos con lo que logré que sus tetas no pararan un momento quietas, que la chavala se meara y que, como me había sucedido con otras mujeres y aunque lo echara a chorros, su pis sólo pudiera salir al exterior cuándo mis movimientos de mete y saca lo permitían lo que hizo que la micción fuera tan sumamente intensa y larga que duró, prácticamente, hasta...

La boda de mi primo (parte catorce y última).

Décimo cuarta y última parte de esta historia. Espero que les haya gustado a mis lectores, que hayan disfrutado y se hayan enganchado a lo acontecido.

Por lo que a mí respecta, no he vuelto a tener la oportunidad de poder echar tanta cantidad de polvos en tan poco tiempo pero al regresar de aquel viaje me había olvidado por completo de Joanne y aparte de continuar manteniendo relaciones sexuales regulares con Reyes y Violeta y de participar en las orgías de la noche de los viernes y sábados con mi grupo de amigos, unas semanas más tarde conocí a Inés, una atractiva empleada municipal, madre soltera de dos crías que la habían hecho hombres diferentes, que...

Adicto al sexo (Parte dos).

Segunda parte de la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Cada vez que algún chico ó chica quería unirse a nuestro grupo lo primero que tenía que hacer era enseñarnos sus atributos sexuales y el culo y acostumbrarse a que, delante de los demás, les hiciera todo lo que me apeteciera por lo que cada día jugábamos menos para dedicar la mayor parte de nuestro tiempo al sexo lo que ocasionó que llegara un momento en el que no me quedó más remedio que acceder a la pretensión de Mari Cruz y de Rebeca, su encantadora, escultural y pelirroja hermana mayor, dejando que se e...

Adicto al sexo (Parte uno).

Comienzo a publicar la última historia que he escrito que, además, es la más larga. Espero que las personas que la lean se vayan enganchando a ella y para bien ó para mal me dejen sus comentarios que, de antemano, agradezco.

Desde temprana edad mi atractiva, pervertida y viciosa prima Jimena, que era seis años mayor que yo, consiguió que me acostumbrara, en cuanto había ocasión y ella se encargó de que surgiera desde el momento en que se ofreció a recogerme por la tarde al salir del colegio, a permitir que me bajara el pantalón y el calzoncillo en cabinas telefónicas, cuartos de baño, márgenes del río, portales, rellanos de escaleras y cualquier otro lugar que se la ocurría para que la enseñara mis atributos sexuales que me mir...