El hermano de mi cuñada

En El cuñado de mi hermana era la versión del hombre adulto: aqui la misma historia de sexo,obsesión y sexo pero contada por un chico de 18 años.

Yo me crié en el campo, entre vacas, toros, novillos, pollos, cerdos, gansos, pájaros. Mi horizonte fue la llanura interminable de la pampa húmeda argentina, con sus inmensas extensiones de tierra cultivada, o de pastoreo, con ese cielo tan azul, tan diáfano y tan limpio, y mi mar, o lo que yo fantaseaba era el mar, era una laguna que quedaba a media legua de la tranquera, entre pajonales, y cañaverales...

Mi mundo fué durante mucho tiempo, una estancia. Como se llaman acá a las haciendas. Yo so...

El cuñado de mi hermana

Un casi cuarentón que ya está de vuelta de la vida, y un huesped que le calienta la vida y todas sus partes...

Sólo a la desubicada de mi hermana Patricia se le podía ocurrir mandarme a su cuñadito de huésped. "Para que te haga compañía "me dijo la muy zorra. Yo vivía bien, en una casa no muy grande de dos plantas, que habíamos heredado con mi hermana del abuelo Julian, en un barrio tranquilo de Buenos Aires. Trabajaba, hacía deportes, viajaba, tenía mi auto importado, mi equipo de audio, mi DVD ultima generación, salía con mis amigos. Viajaba. Hacía deportes. Vivía mi vida. No necesitaba tener que cuidar a un...

La carne de Tiago

Gus es tímido, estudioso, solitario y vegetariano. En una cita a ciegas lo conoce, se entusiasma, se enamora y por fín se encama con alguien de carne y hueso.

Yo fui a esa pizzería porque la coreana me obligó. No suelo ir a pizzerías. En realidad no voy casi a ningún lado. Salgo poco. Vivo lejos de todo. Soy un flaco (musculoso pero flaco), vegetariano, muy tranquilo, muy, pero muy tímido. Ella me dice siempre, que no haga tonterías y que no me encierre "porque así no te vas a casar" Soy un chico demasiado casero, quizás poco sociable. Un solitario que se la pasa estudiando, o escuchando música, navegando por Internet., o trabajando en el negocio de mi tío....

Tocame que me gusta

Tenía 24 años, estaba casado y esperaba su primer hijo y un día viajando en tren, descubrió el sexo entre machos.

Me había casado con María Angélica hacía un año y odiaba mi trabajo. Odiaba el sueldo miserable que me pagaban, las largas horas de números sin sentido, el ambiente laboral competitivo y chismoso, al estúpido de mi jefe, y hasta el olor a café express de la horrible cafetera que había cerca de los escritorios.

Pero lo que más odiaba eran los viajes en el ferrocarril que me llevaban desde mi pequeña casa que alquilaba en los suburbios, a la estación Constitución de Buenos Aires. Todavía no habían...

La visita del gato

Un adolescente caliente, un bailarín de gira, una noche de verano, algunas mentiras y un "Gato" cogedor.

Finalmente se los dije a mis padres. Soy gay. No lo sientan como que es culpa de Ustedes, no es culpa de nadie, pero me gustan los chicos, me gustaron siempre. Mi vieja se puso a llorar, mi viejo cerró el diario que estaba leyendo, lo tiró contra un sillón, se levantó y salió al jardín. En aquel momento fue mucho más que una tormenta. Fue como un huracán, un tornado, la erupción de un volcán. Llantos, rabia, recriminaciones, amenazas, terapias forzadas, prohibiciones, vigilancias, controles, encierros...

Casado y a la caza

Un chico enamoradizo, un "papi" de mirada triste, cosas perdidas y encontradas y camas calientes.

Había empezado una dieta. Necesitaba bajar unos cinco kilogramos para sentirme conforme con mi cuerpo. Una larga relación sentimental había concluído y me había dejado con un residuo de deudas en la tarjeta de crédito, (nada menos que en la que me había extendido mi padre), pero también soledad y exceso de peso. Pero claro que no estaba gordo, apenas fuera de línea: tenía algunos rollitos y eso me hacía extrañamente atractivo para algunos, menos para mí Iniciaría un régimen de comidas pobre en grasas...

Departamento de solteros

Un hombre explorando su sexualidad, un departamento con goteras, y un "negrito" my atractivo y cogedor.

No se como empezó mi vida como puto Posiblemente el mismo día que mi madre murió, tras una larga enfermedad. Cuando volvimos del cementerio, no esperé mucho para decirle a Marisa que quería que nos separáramos. No se asombró. El matrimonio había sido un fracaso. En mi caso una manera de satisfacer la última voluntad de una madre preocupada por un hijo que no sentaba cabeza. Un hijo que nunca se atrevió a enfrentar lo que sus padres le imponían, en otras palabras, fué una farsa, un toldo muy angosto pa...

Besos que te muerden en la boca

La magia y el delirio de los besos, huellas y señales de una pasión encendida.

BESOS QUE TE MUERDEN EN LA BOCA-

Besos que te muerden en la boca.

Labios que se deslizan por tu alma.

Antorchas de una pasión que quema.

Rosas rojas que lloran su perfume

En la tibieza absoluta de tu piel.

Besos que te doy en la mirada.

Ojos que se entornan sorprendidos.

Candelas de este amor enbelesado

Que me hacen tu amo y tu cautivo.

Besos que preguntan en tu cuerpo.

Labios que susurran mi ternura.

Fogatas de delirio que me invaden. ...

Accidente de transito

Un abandono, un choque en plena calle, y una nueva oportunidad. Algo de amor y muy caliente.

Yo venía manejando mi auto con precaución, como siempre. Un tema de Anastacia sonaba en la radio y yo seguía la melodia, mientras casi sin querer me acariciaba la verga. Desde hacía dos días andaba caliente y si no conseguía con quien coger, iba a terminar caminando por la azotea con las manos. Había roto con mi última pareja y ya hacía bastante que no "la mojaba", incluso desde antes de terminar con Fidel. Si Fidel, como el Comandante y tan barbudo, cruel y mentiroso como aquel.

El pavimento es...

Mi compañero de viaje (2)

Santi descubre la vida gay, sufre un desengaño y encuentra un compañero de viaje definitivo.

Ya no podía negarse. Me había convertido en gay, casi de la mañana a la noche. Del homofóbico hijo, de un Teniente Coronel en retiro efectivo y su pacata y piadosa esposa, no quedaba ni el huesito dulce. Me miraba en el espejo, una y otra vez, lo que era una costumbre nueva y me decía: sí, sos un culo roto, y confesalo: te gusta. Si te gusta. No cabían dudas. Del Santiago Valentín Domínguez , alias Santi, que habia puesto un aviso en el diario pidiendo acompañante para un viaje a Europa, no quedaba na...