La Posesión de Ana Gayarre 01: viaje de novios

Posesión demoníaca, dolor, incesto...

Estas cosas, cuando se cuentan, que no es fácil, se cuentan con un cierto temor. Una teme, claro está, que la tomen por loca, que piensen que está enferma de la cabeza. No me ofende. Comprendo que es lo normal. Yo misma, hubiera supuesto eso mismo de quien hubiera venido a contarme algo así.

Hasta que lo vi con mis propios ojos.

Sucedió la primera noche que pasamos en el caserío, a la vuelta del viaje de novios, Ander y yo (yo me llamo Amaia). Habíamos estado quince días de ensueño en Islandia y...

Terapia de choque

Un cuentecillo de cornudo narrado esta vez en primera persona y con mucho cariño, sin humillaciones. Podría ir en otra categoría, quizás en Voyeur, o en Orgías... Contiene unas pinceladas de sexo homosexual. Nada grave. Escríbeme y cuéntamelo si te gusta :-*

Yo sé que no es fácil de entender. Si lo fuera, todos ustedes lo harían. Cuando no lo hacen, es evidente que no comprenden el placer que produce. Bueno, claro, que cada uno es cada uno y tiene sus gustos no lo pongo en duda, pero estos son los míos. Bien es posible que a usted, por ejemplo, no le gustara encontrarse en mi misma situación, pero yo le recomendaría que probase, aunque fuera una vez, para salir de dudas. Desde luego, le puedo asegurar que si le produjera el mismo placer que yo siento, repetiría...

Ana 02: normalización

No es fácil escojer categoría. Bueno, además de lo elegido, tenemos sissy, cornudo, femdom, un poquito de cock torture,... Un buen poutpurrí de géneros.

Las cosas no podían haber salido mejor. De hecho, ni en el mejor de mis sueños, y no soy poco ambiciosa, se me hubiera ocurrido imaginar que fueran a salir tan bien.

Tengo que admitir que en un principio, cuando Leo empezó a hablarme de intercambios, de hacerlo con otras personas, de introducir “novedades” en nuestro matrimonio, y toda esa ristra de sandeces, me hice la estrecha, a pesar de que, desde la primera sugerencia, la idea se me antojó muy atractiva. Nuestro matrimonio, después de veinte años...

Nadia 04: Interludio

Filial, sissy, homosexual, lésbico... Un cuentecillo muy completo.

Bueno, les ahorraré los detalles, por que tengo la sensación de que ustedes son más de ir al grano ¿No? De agarrársela, empezar a meneársela imaginando, y terminar enseguida escupiendo la lechita al aire, o echándosela en la tripita, o en la mano… Ya saben a qué me refiero, me imagino. Así que preferirán que nos evitemos entrar en una descripción exhaustiva de lo sucedido. Nada que interfiera en lo que es su última preocupación. Así que lo justito:

Empezaré contándoles que me llamo Mar (mi madre me ll...

Bella 05: crossover (Doña Luisa 06)

Una nueva experiencia para Bella y Alberto.(Aviso: contiene escenas de sexo homosexual explícito)

Durante los meses siguientes, nuestra relación había ido complicándose de manera extraordinaria. Bella asumía con mucha naturalidad aquel papel dominante con respecto a mí, y parecía gozar ejerciéndolo. Era como si se hubiera librado de una losa y gozara de su recién recobrada libertad y, por alguna razón, quizás por que le recordaba los años que había pasado sumida en el desconcierto que le habían generado los abusos que padeciera en su infancia-, mi humillación contribuía a hacerla sentir más libre.

...

Bella 04: Nocturno

Sigue nuestra historia de cuernos y sumisión con un capítulo íntimo y hogareño.

De Bronco no supimos nada más, aunque, con el tiempo, volvimos a tener alguna relación donde intervino, aunque fuera de manera indirecta, pero eso ya se contará a su debido tiempo.

El caso es que, desde que mi marido llamara a aquel amigo colombiano, a todos los efectos desapareció de nuestras vidas. De hecho, ni siquiera fui capaz de volver a encontrar su Tumblr, ni su teléfono estuvo operativo cuando traté de localizarlo. Bueno, eso me da un poco de vergüenza recordarlo, así que me van a permitir qu...

Bella 03: castigo

Advertencia: Contiene escenas de sexo homosexual explícito

La firma del acuerdo me había reportado un impresionante beneficio, y estaba contento, así que, para compensar a Bella por el retraso, decidí comprar un reloj de Cartier, una monería rectangular, elegante y carísima.

Durante el viaje de vuelta, adormilado en mi asiento del avión, tuve tiempo de reflexionar acerca de la extraña relación que había establecido con Don Mauro, el colombiano para quien había resuelto la fusión. El tipo, un caballero como él mismo debía imaginar que eran los “españoles de an...

Bella 02: flashback

Seguimos con nuestra historia de cuernos y descubrimientos.

Así que… Allí estaba, sujetando el pomo de la puerta con la mano temblorosa, preguntándome si debería…

Aunque… Quizás sea mejor empezar por el principio. No sé. Incluso sabiendo que ustedes no me conocen, me da pudor pensar que pudieran… Que pudieran no entenderme. Sé que es terrible mi historia. Lo comprendo. Imagino que muchos de ustedes pensarán de mi que soy una zorra. En cierto modo lo soy, no voy a negarlo. Sin embargo… Bueno, podría decirse que, de algún modo, mediante algún proceso intelectual...

Por la rendija

Un cuentecillo de cornudo voyeur.

A través de la rendija de la puerta de tu cuarto entreabierta, apenas alcanzas a ver unas piernas morenas, musculadas, aunque sin excesos, una polla, gruesa, curva y oscura, de capullo descubierto, fuertemente marcada por una red de venitas violáceas. La mano de tu mujer, arrodillada entre ellas, la estrangula por la base acentuando su relieve. Se inclina sobre ella y la chupa. De cuando en cuando, la saca de entre sus labios y ves su capullo húmedo y brillante. Entonces, ella le habla en tono mimoso, como...

Intimacy 07.2: Vergüenza

ADVERTENCIA: contiene sexo homosexual. Un paso más en la humillación a que someten a nuestro protagonista Mila, su mujer, y sus hijos Pablo y Quique.

Por la mañana, me despierto tarde. El sol brilla en el salón. Dibuja un trapecio resplandeciente en el espacio vacío, entre el tresillo, interrumpido a intervalos regulares por los listones que cuartean la cristalera.

Mila apura sin prisa su café a sorbos cortos. No se ha puesto la bata. El camisón se pega a su piel blanca, dibuja sus contornos amplios. Al trasluz, puedo adivinar el tono sonrosado de sus pezones. Mientras ocupo mi silla, junto a la mesa, me descubro tratando de ocultar una erección ve...