Colette
Una escena art nouveau, delicada, decandente y musical, de sexo andrógino y elegante.
Colette dormitaba lánguidamente recostada sobre la chaise longue de su dormitorio, dejando morir la tarde, apurando a lentos sorbos su copa de agua fresca con absenta verde perfumada, sin escuchar las gymnossiennes y gymnopédies que André desgranaba incansablemente en el piano del salón, que llegaban amortiguadas hasta su alcoba, como la luz, que atravesaba sin rasgar los altos visillos blancos del ventanal, tamizada para evitar que el sol de primavera mancillara la elegante palidez de su piel de porcelana....