En este lado del espejo
¿Quién era la chica del espejo? ¿Dónde está el límite entre fantasía y realidad?
Me incliné hacia atrás, hasta que mi espalda se amoldó a la curva de la bañera. Luego estiré el cuello y cerré los ojos para aspirar mejor el perfume del champú y del gel. Me dejé embriagar por los olores penetrantes de los botes verdes, rosas y ocres.
La espuma me alcanzaba al cuello y luego hasta las orejas. El agua estaba muy caliente y me estremecía al sentir el chorro del grifo sobre mi vientre, hasta que terminé por acostumbrarme y me pareció la temperatura natural de mi cuerpo. ¡Era tan r...