El asesino (y 4)
Fin, por el momento, de la historia contada por un hombre traumatizado, que solamente disfrutaba del sexo cuando mataba a sus víctimas.
Unos de sus competidores más directos y que también quisieron el mercado que quedaba libre eran las mafias chinas, las triadas, concretamente dos que eran las que le afectaban directamente y a las que me ordenó vigilar y evitar que entrasen en su territorio.
No entendía bien el inglés y menos el chino, pero como buen observador, conseguí descubrir que periódicamente tenían reuniones en sitios discretos y tras varios meses, me enteré que iban a tener una reunión los jefes y sus inmediatos, pero no pu...