Llegando cansada del trabajo
Un día más de carga en el trabajo.
Salí al balcón y comencé a quitarme esa coleta alta apretada que traía, las gafas, me desfajé la blusa del pantalón y desabotoné un poco de la parte superior. Me senté encorbada y me quedé viendo a la nada unos segundos, me incliné para quitarme los tacones, y las medias a las rodillas que traía.
Continué viendo la ciudad y la nada por unos minutos más, viendo cómo las pequeñas luces encendian y se movían.
Eso era lo que me hacía falta, pensar en nada por unos minutos. Eso y un bocadillo, así qu...