A nadie le gusta que lo engañen 16.
Sigue la historia. Sentía como se estremecía cada vez que le pasaba la lengua por su clítoris.
A nadie le gusta que lo engañen 16.
Cintia se preocupaba porque Luis para venirse desde Corrientes, había abandonado el secundario, así que averiguó y trajo los programas que debería rendir a fin de año, Luis estudiaba de mañana en la oficina, de paso atendía el teléfono, por las tardes Cintia le tomaba lo estudiado, me parece que cada día está más enamorado Luisito de Cintia, va Pedro y José también, bueno analizándolo a fondo quien no va a estar enamorado de semejante hermosura…
Cuando es...