El desvirgamiento de Rufina

-No, no me comieron las tetas y el coño. No sabía que los hombres hacíais esas cosas.

INTRODUCCIÓN

En la aldea gallega en la que se desarrolla este relato, cómo en casi todas las aldeas, se conocían todos los vecinos, unos se llevaban bien y otros se llevaban a matar. A matar se llevaban Elisardo, el "Puerco Espín" y Pablo, el "Broncas", que eran hermanos y se llevaban a matar porque Elisardo le desvirgara la novia a Pablo. Elisardo se marchó para Suiza para que la sangre no llegara al río. Tres años más tarde Pablo se marchó para Alemania con Luisa, que en ese momento ya era su mujer,...

Rosa, casada, incestuosa y morbosa

Rosa es una profesora de instituto. Un día que está corrigiendo unos exámenes en su cama abusan de ella un hombre que lleva puesta una máscara de V se Vendetta y dos chicas que llevan puestas máscaras de Cat Woman... Y hasta aquí puedo destripar el relato.

Rosa, que era una maestra de instituto y que vivía en el chalet de su suegro, sentada en un sillón del salón hablaba con el viejo, que era juez y estaba enfrente de ella sentado en otro sillón, le decía:

-... Tu hijo sabe que tuve relaciones con amigas, de hecho a veces le comento que me gustaría volver a comer un coño.

-No me lo creo.

-Puedes creerlo, de hecho lo excita y acaba comiéndome el coño él.

-Me encanta que digas la palabra coño. Se te llena la boca al decirlo y suena tan s...

Incesto en la casa de mi hermana

Le lamimos las axilas. Luego le magreamos y mamamos una teta cada uno. Sacamos nuestras pollas empalmadas. Cogió una con cada mano...

Mi sobrina Helena estaba sentada en uno de los taburetes de la barra de un puticlub con la cabeza baja y perdida entre sus pensamientos. Me senté en un taburete que estaba al lado del suyo, pedí un 1866 y le dije:

-¿Cuánto?

Giró la cabeza y me dijo:

-Tú siempre tan bromista, tío

Con una sonrisa en los labios y mientras la camarera me servía el brandy, le pregunté:

-¿Qué haces en un sitio cómo este a estas horas?

-Matando el tiempo.

No estaba de buen humor. Intuí que...

Incesto a la hora de la siesta

En España el deporte que más se practica es la siesta, pero hay siestas y siestas.

Valeriano era un joven al que sus padres habían enviado de muy niño a una aldea remota con los abuelos. Esta aldea solo tenía cuatro casas y en ellas vivían personas ancianas. Lo habían mandado con sus abuelos porque no tenían con que mantenerlo. Ahora tenía 18 años y volvía para trabajar en su oficio y ayudar así en la economía familiar.

A Valeriano en su primera noche en casa lo despertaron unos ruidos que venían de la habitación de sus padres. Se levantó de cama y se limpió las legañas. Al llegar a...

¡Métela de una vez! ¡¡Desvirga mi culo!!

Te iba a hacer de todo porque parecías una mujer sumisa. ¿Sumisa?!Y una mierda!!

¿Aún te acuerdas? Yo me acuerdo de que eran las doce del mediodía cuando llegué al aeropuerto de Heathrow. Me estabas esperando en la terminal. Me viste a lo lejos y sonriendo me saludaste con la mano izquierda levantada. Vestías con un jersey azul, un pantalón azul y unas botas altas. Te devolví el saludo y la sonrisa. Al llegar a tu lado, trajeado y encorbatado, me diste dos besos en las mejillas. Luego me dijiste:

-Bien venido.

Te respondí.

-Bien hallado.

Nos fuimos caminando por...

Ven y rómpeme el culo

Tentando la suerte, a veces nos toca la lotería.

Ya le había echado los tejos varias veces y parecía no desagradarle a pesar de la tremenda diferencia de edad que había entre la bibliotecaria y yo. Ese día tenté mi suerte. Lin, la bibliotecaria, estaba de puntillas cogiendo en una estantería alta el libro que le había pedido: Otelo de William Shakespeare. Le eché una mano entre las piernas y palpé su coño, Lin giró la cabeza y ni seria ni riendo me dijo:

-¿Encontró lo que andaba buscando, caballero?

Al no reprenderme le eché las manos a las te...

Me corro en tu polla, papá.

Una joven es pervertida por su tía y por su hermano y acaba seduciendo a su padre y sodomizando a...

El final

Berta era una joven morena y delgada, sus ojos eran azules, su cabello negro y largo, sus tetas eran redondas y su culo importante. Tenía diecisiete años cuando se casó y lo hizo para empezar una nueva vida lejos de su tía, de su padre y de su hermano, pero pasado un tiempo lo que le hacía su marido en la cama no la llenaba. Una noche le habló de lo que necesitaba en el sexo para ser feliz.

-... Ya ves, soy una mujer muy rara.

Benito era un hombre enamorado de su esposa y compresi...

Incesto en el bosque

El comer y el rascar todo es empezar.

Amaia era una jovencita delgada, de estatura mediana, morena, de ojos marrones, cabello negro, tenía las tetas pequeñas y un culito redondito. Estaba de vacaciones de verano en Galicia y fue con su  prima carnal Florencia a merendar al bosque, o sea, fueron de pícnic. Después comer tortilla y de beber vino tinto con gaseosa, a Amaia, que no estaba acostumbrada al vino, se le soltó la lengua.

-¿Sabías que soy independentista?

Florencia le preguntó:

-¡¿No serás peligrosa?!

-No, yo soy...

Comiendo y follando el primer culo

Le abrí las nalgas y vi su ojete, era un ojete muy pequeño para un culo tan grande.

Secundino tenía 18 años, su hermana Faustina 19 y estaba recién casada, Carmen, que era tía y madrastra de Secundino y de Faustina tenía 34 años, y se había casado con Lorenzo, el padre de Secundino y de Faustina después de haber muerto su mujer. Lorenzo tenía 46 años y andaba embarcado. Carmen tenía una hija de pecho de Lorenzo. Esta es su historia, historia que se desarrolla en una aldea gallega y que contaré cómo si yo fuera Secundino.

Era una tarde de primavera. Yo había ido a casa de mi hermana p...

Esa polla fue hecha a medida para mi culo

Acabamos los tres boca arriba sobre la cama tirando del aliento, pero contentos.

En una tarde soleada que iba a tomarme unas cervezas las vi, Maca y mi nuera estaban sentadas a una mesa en una terraza. Tomaban un par de refrescos mientras charlaban animadamente. Me acerqué a ellas y les dije:

-¿Calentando la merienda?

Me respondió mi nuera.

-Sí, pero tú no estás invitado a merendar.

-¿Puedo sentarme?

-No, que te conozco y después vas a querer venir con nosotras.

Maca no estaba de acuerdo con ella.

-No lo trates así, mujer, gracias a él estamos a...