Intercambio de rabos.
Un bonito proyecto de viaje para romper el hielo de un intercambio, se convirtió en una bacanal de lujuria donde descubrí otro maduro semental que me hizo perder la concincia.
Llevábamos tiempo tratando de tocar el tema del intercambio con un matrimonio amigo con el que habíamos flirteado en conversaciones sobre el sexo liberal, pero sin llegar a dar el salto, por lo que preparamos un viaje para romper el hielo.
Les contare que son un una pareja madura, el 60 años se llama Juan y es muy atractivo, robusto de cuerpo pero bien proporcionado con el pelo blanco y abundante para su edad, y ella Mercedes de unos 52 años con un cuerpo también escultural, son una pareja que se cu...