Una situación casi real
Una silueta de mujer avanzo tímidamente y cerró la puerta a su espalda. Olía maravillosamente. Se arrodilló, me bajó los pantalones y metió mi polla en su boca.
UNA SITUACION CASI REAL
No recuerdo como nos pusimos en contacto. Bueno, quizás lo recuerde pero no viene al caso. Ella estaba interesada en la sumisión aunque el solo hecho de planteárselo le causaba una gran contradicción. La contradicción necesaria que todos experimentamos al principio como consecuencia de haber sido educados en una moralidad que ahora nos es ajena.
Unos principios que en algún momento de nuestras vidas nos replanteamos. Unos principios tan débiles como un castillo de na...