Con mucho vicio dentro de mí (Parte 17).
Parte número diecisiete de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.
Pensaba que, después de aquello, Iris no volvería a pisar mi despacho, al menos sola, pero al día siguiente, poco después de que acabara de mantener mi sesión sexual matinal con Candelas y Verónica, entró por la puerta. Permaneciendo de pie, se apresuró a indicarme que, de momento, no buscaba más sexo puesto que con toda la tralla que la había dado la tarde anterior se consideraba servida para una semana ó más, que, a pesar de sentir un completo repertorio de escozores y de molestias, había podido ponerse l...