Jazmín, una princesa oriental (Parte número 2).

Segunda parte de esta historia que es una de las últimas que he escrito y que publico en primicia. Espero que sea de vuestro agrado.

El centro, como los demás existentes en aquel país, tenía muy mala fama puesto que cuándo se permitía a sus internos salir al exterior los chicos, convertidos en auténticos sementales, estaban tan ansiosos por mojar de forma regular que no cesaban en su empeño hasta conseguirlo aunque, para ello, tuvieran que forzar a sus víctimas lo que ocasionaba que este tipo de delitos sexuales se incrementara cada vez más mientras que la mayoría de las chicas se dedicaba a lucir sus encantos en ciertos establecimientos...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 24).

Ultima parte de esta historia que confío haya sido del agrado de mis lectores.

Sara volvió a encargarse de las distintas labores domesticas mientras Iris comenzaba un nuevo proceso de selección en el que tenía bastante bien asumido que no debía de precipitarse y que tenía que elegir a la mujer que considerara más apropiada y cualificada para cubrir nuestras necesidades. Después de pasarse más de un mes manteniendo entrevistas con las posibles candidatas me dijo que había elegido a una joven a la que acababa de abandonar su compañero sentimental, al que le debía de agradar cambiar con...

Pervertido y semental (Parte número 1).

Comienzo a publicar, dividida en varias partes, otra larga historia que espero sea del agrado de mis lectores más fieles y que, los que aún no hayan leído nada mío, la siga con interés. Gracias a todos y para bien ó para mal, espero vuestros comentarios.

Catalina, mi madre, se encontraba preñada de mí cuándo, a través de la extracción de flujo que la realizaron en una revisión rutinaria propia del embarazo, los médicos la detectaron un tumor vaginal. La hicieron la biopsia y una vez que se confirmó que era maligno, la indicaron que una intervención quirúrgica de este tipo en su estado entrañaba demasiados riesgos para el feto por lo que decidió no poner en peligro mi vida, continuar luciendo “bombo” y esperar las nueve semanas que la quedaban para dar a luz...

Jazmín, una princesa oriental (Parte número 1).

Primera parte de una de las últimas historias que he escrito y que publico en primicia. Espero que sea de vuestro agrado.

Gwemdoline, su madre, engendró a Jazmín, una exuberante y seductora joven asiática, durante un verano en el que, siendo una cría en edad colegial, mantuvo relaciones sexuales con un europeo muy bien dotado, de escaso cabello y de mediana edad, que se sentía especialmente atraído por las chavalillas orientales ardientes, guapas y viciosas. En pocos días y a base de enseñarla sus atributos sexuales y de permitirla que le sobara la chorra y los huevos y que le pajeara para sacarle la lefa, consiguió que la jov...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 23).

Parte número veintitres y penúltima de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Iris, después de ver aquello, no lo dudó un momento y en cuanto a la mañana siguiente Carolina llegó a casa, la echó. Su decisión me sorprendió ya que consideraba que aquella joven era una autentica golfa, salida y viciosa, por lo que me mostré en desacuerdo con ella y como no estaba dispuesto a dejar que se fuera sin haberla “catado”, al terminar de trabajar por la tarde me dirigí a la facultad en la que cursaba sus estudios y la esperé en la puerta de acceso. Los minutos pasaron muy despacio hasta que, po...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 22).

Parte número veintidos de esta historia, que se va acercando a su final y que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Carolina lo tenía todo controlado puesto que un cuarto de hora más tarde Rafael, su supuesto novio, llamaba a la puerta. Lo abrió manteniéndose en braga que el joven la bajó hasta las rodillas en cuanto entró y cerró la puerta para, acto seguido, sacar al exterior, a través de la bragueta del pantalón, su estrecha pero larga y puntiaguda polla que restregó en la desnuda seta de la muchacha mientras la besaba apasionadamente en la boca, la apretaba las tetas con sus manos y cuándo sus labios se separaban, la...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 21).

Parte número veintiuna de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Iris intentó suplir a Verónica complaciéndome en todo y a todas horas pero, poco a poco, el desgaste que sufría la fue pasando factura y como no disponía de tiempo para recuperarse de una sesión para otra comenzó a perder peso lo que para una joven tan delgada como ella era como convertirse en anoréxica por lo tuvo que reconocer que no me podía dar toda la satisfacción sexual que la demandaba y atender debidamente su trabajo y la casa por lo que pensamos en contratar a una asistenta que se ocupara de las di...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 20).

Parte número veinte de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Durante el mes de Septiembre Iris y yo tuvimos que disfrutar de nuestro periodo vacacional. Habíamos pensado pasarlo juntos y aprovechar que se había ido habituando a que la diera caña para mantenernos inmersos en una frenética actividad sexual pero, al enterarse de que la salud de su progenitor se había complicado tras sufrir una angina de pecho, tuvo que desplazarse a su país de origen echando por tierra todos nuestros planes. Al final, me tuve que ir solo dos semanas a una conocida isla del Mediterráneo,...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 19).

Parte número diecinueve de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Candelas y Verónica pretendían disfrutar de un verano loco a mi lado por lo que cuándo estaban conmigo permanecían más tiempo en bolas que vestidas mientras que a Iris, además de darme muchísimo gusto con la felación que me efectuaba al mediodía, no tardé en comenzar a trajinármela todos los días por la noche después de conseguir mi compromiso de limitarme a echarla dos polvos y una meada dentro del chocho tras darla mi primera lechada mientras hacíamos un sesenta y nueve ó me realizaba una cubana con mi ve...

Con mucho vicio dentro de mí (Parte 18).

Parte número dieciocho de esta historia que confío sea del agrado de mis lectores. Espero vuestros comentarios.

Al día siguiente acababa de mantener mi sesión sexual matinal con Candelas y Verónica cuándo Carla, una de mis superiores, se puso en contacto conmigo a través del teléfono para pedirme que acudiera a su despacho en cuanto me fuera posible ya que tenía que hablar conmigo. Se trataba de una joven de ondulado cabello moreno a la que parte de mis compañeros apodaban la “maciza” pero que no me atraía nada ya que, para mi gusto, no era demasiado agraciada de cara, me parecía de constitución ligeramente fuerte y...