La gata y su presa
A veces a la cazadora, la cazan.
La gata y su presa
Venezuela 2. Continuación de VIDA DE HOTEL.
"La gata caliente sobre el tejado de zinc", así creo que se llama una obra de T. Williams. Pues gata y caliente estaba yo, al subir a mi habitación. Tomé una decisión, extraña en mi, no aliviarme con una pajita, quería estar "cachonda", como dice mi marido, toda la noche.
Tras ducharme y arreglarme, me maquillé un poco demasiado. Me puse un María Vázquez que había comprado antes de nacer mi hijo, y que era un lujo, color b...