Gatita y perro
Poco a poco Elena avanza en su relación con Bartolo, sin descuidar sus obligaciones de mujer casada.
GATITA Y PERRO.
Tenía todo el día para jugar con mi nuevo amante, Bartolo, mi caniche enano. Me puse una colaless, no suelo usarlas , se meten demasiado por el valle del sexo, pero era lo que quería. Cubrir sólo mis entradas, para evitar que el perro me pudiera contagiar algo, que la salud es muy seria.
Agarré un toallón, lo extendí en el suelo del salón, y me tumbé.
Mi bolita de pelo vino corriendo hasta mí, lo tomé en mis manos y lo abracé. Era un placer sentir contra mi piel sus r...