Las aventuras porno-galácticas de la Calípide 4-4

La comandante del carguero espacial Calípide IV en un planeta de hermafroditas.

La hermafroditas del planeta Delix.

Diario de a bordo del carguero inter-espacial Calípide IV, fecha estelar: 23 de octubre de 345 de la tercera época.

"La nueva misión consiste en transportar suministros técnicos y tecnológicos al planeta Delix, mundo hogar de una raza de hermafroditas. El viaje es corto y lo realizamos en poco tiempo y sin incidentes de mención. Todos estamos deseando conocer a esa raza de hermafroditas, se habla mucho de ellos por toda la galaxia, pero nadie de la tripul...

Las aventuras porno-galácticas de la Calípide 4-3

Tercera entrega de las fantásticas y eróticas aventuras del carguero espacial Calípide IV.

Alien, el octavo pasajero porno.

Diario de a bordo del carguero inter-espacial Calípide IV, fecha estelar: 2 de agosto de 345 de la tercera época.

"Siguiendo órdenes preestablecidas por la Compañía, la nave desvía su rumbo de vuelta al sistema Orión, dirigiéndose a un desconocido planeta de pequeñas dimensiones situado en nuestra ruta, a apenas 324 millones de kilómetros de las rutas comerciales habituales. Entraremos en su atmósfera, de acuerdo con las normas que la Compañía establece en e...

Las aventuras porno-galácticas de la Calípide 4-2

Segunda entrega de las aventuras porno galácticas del carguero espacial Calípide IV.

Zombies violadores.

La sombra se deslizó sigilosamente hasta la cabina de la comandante, abrió la puerta con su pase especial modificado y encendió las luces tras cerrar la puerta a su espalda. La habitación se iluminó con una claridad blanca que lo llenó todo, y allí estaba, su comandante, durmiendo plácidamente en su cápsula sueño, ajena a todo lo que ocurría en la galaxia.

Hofrta, mecánico de segunda de la Calípide IV, contempló a su comandante casi sin respirar. Se acercó como si temier...

Las aventuras porno-galácticas de la Calípide 4

Primer relato de porno-ciencia ficción que relata las porno-aventuras del carguero espacial Calípide IV y su comandante en sus viajes galáticos.

La estación espacial había sufrido serios daños tras la última lluvia de meteoritos, cosa bastante corriente en el sistema Omega, y me dije que ese era un buen momento para abandonarla, o me vería obligada a ayudar en las tareas de reparación, y no podría continuar mi viaje en otras tantas semanas. Además, yo no soy mecánico, ni peón reparador, que se encarguen de las reparaciones los que saben.

La nave estaba llena de combustible, las últimas modificaciones y reparaciones terminadas, y ya sólo...

Obsesión

¿Cómo conseguir que el marido de mi madre se meta en mi cama?

¿Cómo conseguir que se meta en mi cama?

Esa era la pregunta que me quitaba el sueño. Que me obsesionaba. Y que me excitaba hasta límites que rozaban la locura.

Hablo del segundo marido de mi madre. Ella se divorció hace algunos años y he oído desde entonces comentarios de todo tipo, las malas lenguas hablando de la poca satisfacción sexual que mi padre la daba, o lo que es lo mismo, que mi madre era poco más o menos que una ninfómana. No creo que sea verdad. Simplemente tuvieron sus diferen...

Me regaló un sueño

Una noche de tormenta, una primera vez, un sueño y un regalo.

Tantas veces había soñado con ella.

Se la había imaginado en todo tipo de escenarios, y con todo tipo de vestidos, desde lo más provocativo a lo más elegante. Se la imaginaba con vestidos de seda, largos e insinuantes, bailando con él a la luz de las velas, una orquesta tocando suave al fondo, estrellas brillando en el suelo y en sus ojos, sintiendo su calor atravesando la ropa y llegando hasta él en oleadas eléctricas. Se la había imaginado desnuda sobre sábanas negras, velos cubriéndolo todo,...

El último cliente

¿Puede surgir el amor entre una prostituta y su cliente?

La noche estaba siendo aburrida, no demasiado calurosa, bastante agradable, pero sí aburrida. Pasaba la una de la mañana y sólo había tenido dos clientes desde que había empezado su "turno", varias horas antes. Una compañera le comentó que esa noche había fútbol, y cuando el partido es importante, eso se nota en la afluencia de clientes.

No era un mal sitio para "trabajar", teniendo en cuenta que no era el trabajo perfecto, pero en aquel parque hasta ahora no había tenido problemas. La policía n...

Sólo una noche

Un alma atormentada encuentra consuelo una noche.

Sentada en la barra del bar, sentía la gente ir y venir, moverse detrás de mí, hablando, riendo, bailando, sudando, bebiendo. Notaba las miradas de los hombres sobre mi cuerpo, alguna insinuación, algún comentario, pero todos eran rechazados, hoy no era el día para ninguno de ellos. La gente se divertía a mi alrededor, flirteaba, exprimía la noche, y el ambiente olía a amor de barra, a sudor masculino y perfume de mujer, olía a cuerpos jóvenes y maduros buscando una salida a sus insulsas vidas, alguie...

Confesiones de una jovencita viciosa (8)

¿Queréis conocer a mi amiga Vanesa?

¿Os he hablado de mi amiga Vanesa? Es una gran amiga mía. Quedamos mucho para tomar café y a veces voy a su casa para tomar una copa y hablar de ropa, hombres, ya sabéis, cosas de mujeres. Es muy guapa, es bastante alta y delgada, con un pelo negro y liso maravilloso, y un cuerpo envidiable. Tiene las piernas largas, y dos pechos grandes pero sin exagerar, en realidad son como dos grandes manzanas, coronadas por dos pezones muy duritos. Es casi tan provocativa como yo vistiendo, y tendríais que ver có...

Confesiones de una jovencita viciosa (7)

Después de probar la calle como una puta más, decidí probar algo más fuerte...

La experiencia que tuve en la calle haciéndome pasar por prostituta y que habréis leído en algún otro capítulo de mis confesiones me hizo pensar en eso durante mucho tiempo. El hecho de ser follada y humillada por un desconocido y que luego me pagara me excitaba hasta extremos que no podía imaginar. Que me metieran mano en el metro o que me follara alguien al que había conocido en una disco era una cosa, pero esto era diferente, era como cruzar una línea, hacerlo más salvaje todavía. Así que después d...