Catorce orgasmos

Un poeta cojelón, encuentra en la jodienda la inspiración necesaria para escribirle a su amada un poema de ardor.

CATORCE

El primer palo te lo eché cantando,

con el segundo estaba algo inspirado,

al tercero me estabas provocando

a quedar en el cuarto deslechado.

Tomaste el quinto complacida, cuando

el sexto aún con ganas había entrado,

el séptimo me estaba ya matando,

mas no dejé el octavo retirado.

Con el noveno estabas muy contenta,

el décimo salió con poco fluido,

y el once entre tus nalgas fue a la cuenta.

El doce me dejó muy abatido:

si...

Aspiradora

Cuando una mamadora experta hace su trabajo a conciencia, suelen presentarse situaciones inesperadas.

ASPIRADORA

Sedientos de gozar tú propusiste

un juego, que tu mente soñadora

creó y al que por nombre le pusiste,

de ingenio haciendo alarde: "aspiradora".

Tomaste entre tus manos mi carajo,

guardándolo enseguida entre tus labios;

con ansias empezaste tu trabajo

cubriéndolo con besos algo sabios.

Chupaste enfebrecida la cabeza

y diste a tus mamadas tal destreza,

con una maestría, que te adulo,

que tuve que parar tu aspiradora,

pues...

Chiquita, pero muy ardiente

Era una mujer pequeña, podía pensarse que era una niña, pero era toda una mujer a la hora de joder; pasé con ella unos momentos deliciosos, pero tuve que andar con tiento.

CHIQUITA, PERO MUY ARDIENTE

Nunca pasó por mi mente el que pudiera llegar a la cama con ella. No se me hacía atractiva, pues su modo de vestir no dejaba sospechar lo que guardaba su ropa, aunque de oídas sabía que tenía buen cuerpo, pues me lo había platicado un amigo que ya se la había pasado por las armas, y que a pesar de ser de corta estatura, contaba con algo excepcional. Tenía una cara de niña, llena de pecas y, por su tamaño, engañaba a simple vista, creyéndola muy inocente, pero la verda...

Ansias de joderte

Un deseo incontrolable de poseer su cuerpo me invadía, así que fui en su busca y nos entregamos incansablemente a nuestras pasiones.

ANSIAS

Que ganas tengo, mi cielo,

de poseerte intensamente

por todos tus agujeros.

Que ganas tengo y deseo

estar jodiendo contigo

para que goces conmigo;

de colmar tu coño ardiente

con la leche que almacenan

mis testículos hinchados,

y atarragarte en el culo

mi erecto pene, hasta el fondo,

frotándote las entrañas;

de besar tu cuello grácil

y morderte por los hombros,

para demostrarte mi éxtasis

en el momento supr...

Cuentos de hadas para adultos (4)

Personajes de cuentos infantiles y fábulas, comparten sus experiencias sexuales.

LA SIRENITA

En lo profundo del mar

no quiso estar la sirena

y, como una guapa nena,

fue un palacio a visitar.

Como estaba a todo dar,

es decir, requetebuena,

el rey durante la cena

no la dejó de admirar.

Después la invitó a la cama,

pues se la quería coger,

como a cualquier otra dama.

Ella se dejó querer,

y en la historia alcanzó fama

de que al fin se hizo mujer.

EL VALIENTE SOLDADITO DE PLOMO

Quería el Soldado V...

Jodiendo sin parar

Aunque me había puñeteado, cumplí con el compromiso de cogerme a las dos, y me quedé con los huevos vacíos, pero ella, seguía cabalgando sobre mí.

DESLECHADO

En oscura habitación yo me encontraba,

esperando impaciente tu llamada;

el teléfono, muy quieto, no sonaba,

y el carajo lo tenía bien parado.

Y es que al sólo pensamiento de tus curvas

y la suave exquisitez de tus nalguitas,

la razón me la embotas y la turbas

y mi verga, como bien sabrás, la excitas.

El teléfono sonó, yo, presuroso,

escuché con el cuerpo sudoroso,

tus palabras insinuantes y coquetas.

Mas, no pude acudir a tu...

Los amantes en el paraiso (03: En la playa)

La hermosura de la blanca arena de la playa y el mar "lleno de urgencias masculinas", sirvieron de marco para nuestras pasionales entregas.

EN LA PLAYA

Por la tarde, el calor se dejó venir con gran intensidad, haciéndonos sudar a mares, por lo que decidimos irnos a dar un chapuzón a la playa. Nos pusimos ropa cómoda afelpada y subimos al automóvil. Me dirigí a la avenida que conducía hacia los lugares refrescantes, en los que pensábamos estar un rato.

Durante el trayecto, ella no dejaba de estar jugando con mi pene, que como no era nada inactivo, no tardó en adquirir todo su grosor. Ella lo desencapulló y procedió a frotarlo d...

La otra cara de Adan

Donde se ve y se comprueba, que lo que se dice no es exactamente lo que se piensa.

DIME

D í de una vez, niña hermosa,

A quien tu amor le has de dar,

M ás ya no debes andar

E ntre la espina y la rosa.

L o que te he preguntado

A ún no quieres responder

S in ver que el tiempo ha pasado.

N o sigas ya atormentando

A mi corazón con celos

L ocos, por estarte amando.

G ozaré en tu amor los cielos

A l fin, que he estado esperando,.

S in tener ya más desvelos.

ORGULLOSA

L as horas y los días

A fianzan tu...

Los amantes en el paraiso (02: Al despertar)

Después de una turbulenta noche pasional, ella disfrutó de un delicioso desayuno de huevos con chorizo.

AL DESPERTAR

Aquella mañana, después de una noche tremenda de placer erótico con aquella mujer que dominaba a tal grado mis sentidos, que era capaz de excitarme hasta el punto de corresponder a sus requerimientos sexuales cuantas veces lo deseara, con gran beneplácito de mi parte, que gozaba enormemente con aquel dulce coñito y ese delicioso culo que se me ofrecía para que lo ensartara, y ni que decir de aquella pulposa boca, succionante, cálida y enormemente chupadora, que me transportaba al pa...

Los amantes en el paraiso (01: La llegada)

Pasé mucho tiempo viviendo con la ansiedad de su cuerpo y al encontrarnos, nos sumergimos con desesperación en la vorágine del deseo.

LOS AMANTES EN EL PARAISO

Capítulo Uno: La llegada..

Mis negocios iban mejorando y un futuro bastante halagüeño se dejaba entrever. Me había establecido en una hermosa ciudad, que era un centro turístico, al que la naturaleza había prodigado sus dones, colmándola de bellezas naturales, que la convertían en un verdadero paraíso, y en ella había construido con bastantes dificultades una casa.

Por azares del destino, la mujer que la fortuna puso en mi camino, en mi recorrido de un lugar...