El halloween de los montruos

Relato de humor terrorífico. Aunque un poco atrasado, pues su envío estuvo planeado para la noche de brujas, espero les guste.

EL HALLOWEEN DE LOS MONSTRUOS.

Para celebrar el día

en que los muertos festejan

y sus frías tumbas dejan

para bailar de alegría,

se pensó en una reunión

en que los monstruos se unieran

y contentos departieran

entrándole al vacilón.

Por eso se les enviaron

a todos invitaciones

y así, sus ocupaciones,

al recibirlas dejaron.

Y aceptaron con el alma,

pues parecida pachanga,

no la sacan de la manga

ni yendo a bailar a...

Si te alejaras

No podría soportar la idea de tu ausencia.

SI TE ALEJARAS.

No concibo la idea de que estés de mí ajena;

que no vuelva tu cuerpo, junto al mío, a vibrar;

que en tus labios no exista más calor al besar,

esto casi sería para mí una condena.

Soportar no podría que no fueras más mía;

no sentir tus caricias en mi piel, ni tu amor;

ni tener la respuesta de tu íntimo ardor,

disfrutando del goce en la dulce agonía.

El pensarte de otro sería más que el tormento,

de un dolor que partiera en pedazos mi...

Secretaria aplicada

Quería aprender y le enseñé lo que deseaba conocer, pero tuvo que pagar las clases con su ardiente culo.

SECRETARIA APLICADA

-Pero jefe, -me suplicaba ella- yo quiero conocer de eso y se que usted tiene bastante terreno recorrido. ¿Porqué no me enseña? Ande, no sea malito, le voy a quedar muy agradecida.

Ciertamente, mi secretaria andaba cachonda aquel día y me había acorralado de tal manera, que tuve que acceder a sus deseos, aunque no quería involucrarme sentimentalmente con ninguna mujer que formara parte de mi personal, porque luego empiezan las dificultades, pero ella parecía tan inocent...

Me acostumbré a estar sin ti

El subcosciente es enemigo del olvido.

ME ACOSTUMBRÉ A ESTAR SIN TI

Me acostumbré a estar sin ti,

a no mirarme en tus ojos,

a prescindir de tu risa,

a no beber tus palabras,

a no absorber más tu esencia

y a no ansiar más tu presencia.

Me acostumbré... y sin embargo,

¿Porqué se inquietan mis noches?

¿Porqué te busco en mis sueños

y me atenazan el alma,

este sentir que algo falta,

esta posesión de nada

y este dolor de vacío?...

Desconocida

Unidos únicamente por el contacto epistolar.

DESCONOCIDA

Incógnita alma hermana, tan distante:

desconozco tu faz y tu silueta

mas, percibo tu espíritu romántico

en tu caligrafía transparente.

No he escuchado tu voz, y sin embargo,

al leer los renglones que me escribes,

me penetra la mente gratamente

la armónica ilusión de ella, muy cálida.

Qué diera por tener entre mis manos

las tuyas, que imagino tersas, suaves,

capaces de escribir como lo haces,

expresando limpiamente lo que pie...

Antropofagia

Ciertamente, cuanto deseaba devorarte.

ANTROPOFAGIA

Mis ojos, hambrientos de tu figura

recorrieron veloces

la distancia etérea.

Improvisados comensales,

dieron cuenta al instante,

de un entremés nostálgico,

aderezado,

con tus dos lagos de clorofila inquieta,

y posándose

sobre tus sinuosidades suculentas,

devoraron ávidos

una a una tus líneas eufóricas.

Con deleite sibarítico,

cual pirañas a dieta,

atacaron

el plato fuerte de tu hermoso cuerpo,

q...

Comunión

En un ocaso anticipado, surge el bienestar que me proporcionas.

COMUNION

Con tu cuerpo cercano

calmé mi frío,

que el invierno, en estío,

trajo temprano.

Acaricié tu mano,

dulce bien mío,

y despertase un río

de amor humano.

Un ósculo en tu frente,

agradecido,

deposité ferviente.

Y tu rostro encendido,

tranquilamente,

fue quedando dormido....

Sensaciones perennes

El supremo deleite que le provocó el roce de aquella verga en su culo, perduraron por siempre.

SENSACIONES PERENNES

Su amigo era mayor que él, estaba casi entrando a la adolescencia y las inquietudes sexuales que empezaban a atenazarlo lo habían llevado a esa situación en la que su pequeño camarada sería el vehículo para apaciguar aquellas ansias que necesitaban desfogarse y no había forma de hacerlo a menos que se decidiera a hacerse una puñeta.

Lo había convencido primero regalándole juguetes y dulces y luego con toqueteos al trasero de la criatura, acariciando el pequeño orificio...

La amante ideal

No muchos pueden presumir de tener para su disfrute algo así.

LA AMANTE IDEAL.

Para poder tenerla, tuve que pagar por ella un precio muy alto, cuando se ofrecía abiertamente a quien pudiera pagar por ella tan elevada cantidad, pero después no tuve que desembolsar un solo centavo, ya que ella estuvo siempre dispuesta a complacerme en el momento que yo lo deseara, sin cobrarme nada.

Guarde mi pene siempre deseoso de penetrarla, en su boca, que me lo succionaba con gran delicadeza; en su coño, que me apretaba en una forma por demás deliciosa, y su culo...

El duelo

Ahí les va uno de vaqueros.

EL DUELO

La provocación de aquél pistolero lo había obligado a aceptar el duelo que se realizaría al amanecer del siguiente día.

No podía eludirlo, pues debía mantener su estatus de "el más rápido de la comarca", y este título le redituaba la admiración del pueblo en donde se había establecido y gozaba de los favores de las cortesanas que trabajaban en el Saloon, las que competían por el privilegio de compartir su lecho con el héroe local, quien no se hacía el remolón a la hora de ensartar...