Mi verga

No es por dárselas a desear, pero muchas la quisieran para una larga y ardorosa noche.

INMORTAL

Carajo jodedor, tú, muy altivo,

te elevas retador hacia los cielos,

y enorme es la razón de tu atractivo

que causa mil insomnios y desvelos.

La piel con que te cubres la cabeza,

es como seda al tacto y primorosa,

se expande si la carne se te engruesa,

y envidia crea a un pétalo de rosa.

Remóntome a mi infancia y te recuerdo

cuando eras un gusano acongojado,

pero en cosas de culos, nada lerdo.

Fuiste en mi juventud, de coños, pr...

Por delante y por detras

Estaba tan ganoso, que te dí todo mi vigor, por los dos lados, ¡y cómo lo gozamos!

RELLENA

Abre las piernas, pronto, mi amorcito,

que quiero, bien, joderte, hoy, con dulzura;

meter mi pito ansío, en la hendidura,

palpitante de amor, de tu coñito.

La verga pienso hincarte, hasta los huevos,

que roce mi pelambre con la tuya,

gozando de placeres que sean nuevos,

sintiéndote clavada por mi puya.

Bañada tu rajada he de dejarte,

y tanto, tanto, tanto, he de gozarte,

que no resistirán más mis cojones,

y envolviendo tus nalga...

Puras mamadas

Nuestras lenguas buscaron los sexos ansiosos y gozamos de las más ricas mamadas que pudimos darnos.

VOLCAN

Boca de labios carnosos,

creada para besar,

que chupetean ansiosos

mi gran carajo, al mamar

De mi verga, los acosos,

nunca podrás evitar,

pues mis cojones jugosos

adentro quiero vaciar.

La dicha alcanzarás plena,

al sentir que te rellena

tan tremendo salchichón,

y tragarás mis derrames

cuando gustosa me mames,

de mi leche, la erupción.

ESTRENO

Con tu boquita satinada, dame

una mamada, que me pare el...

La gatita

La habíamos contratado como ayudante doméstica, pero a mí me ayudaba a calmar mis ganas, entregándonos los dos a los juegos sexuales más placenteros.

LA GATITA

Cuando llegó a trabajar de ayudante doméstica en la casa de mis padres, me causó una impresión muy agradable. Era una morena de pelo azabache, labios sensuales y mirada cargada de promesas. Su cuerpo juncal se movía con una cadencia tal, que me alborotaba la verga ante el movimiento de sus lindas nalgas. Sus pechos dorados por el sol sobresalían del escote de su vestido y se antojaban pegarse a ellas para darles una suculenta mamada. No puede dudarse que era caliente como las brasas, c...

Renunciación

Habíamos logrado calmar plenamente nuestros deseos, pero llegó el momento en que tuve que dajarla partir y cuando se me ponía la verga tiesa, tenía que buscar la forma de satisfacerme.

RENUNCIACION

Ya no más, de tu cuerpo tan deseado;

nunca más, a escondidas una cita;

ya no más, de tu coño, que me excita,

y que es lo más rico que he probado.

De tu culo, ya no más, tan apretado;

ni de tu hambre de mamar, tan exquisita;

tampoco de tu clítoris, que invita,

con los labios a tenerlo aprisionado.

Tendré ahora que olvidarme de esas cosas

y esperar a que me atrape, odioso, el tedio,

sin pensar ya en nuestras horas tan hermosas.

...

La visita inesperada

Cuando más ganas le poníamos a nuestra jodienda, un visitante que llegó de improviso, terminó con nuestra diversión.

LA VISITA

Como locos, cogíamos ganosos,

rodando enloquecidos en el lecho,

mamando yo el pezón de tu albo pecho,

y enviándote mis mocos, bien babosos.

Lamíamos los sexos, lujuriosos,

como fieras, de presas, al acecho,

con mi pene, irguiéndose derecho,

gozando de tus labios tan preciosos.

Ya había mi tarea terminado;

sin cuenta palos fueron con certeza

los que con muchas ganas te había echado.

Y al sacar, de tu coño, mi gran pieza,

...

Cuentos de hadas para adultos (5)

Los cachondos personajes de los cuentos de hadas, lidereados por el Gato con Botas, se liberan de su inocencia y se dedican a joder en grande.

EL GATO CON BOTAS

Era el Gato con Botas

un minino muy fiel

y su amo, ante él,

parecía un babotas.

Con sus artes ignotas

consiguió que el doncel

fuera el dueño de aquel

reino en tierras remotas.

Y el inquieto minino,

que en todo era un chingón,

fue a cumplir su destino,

pues tenía el cabrón

el deseo ladino

¡de cogerse a un león!

LOS TRES COCHINITOS Y EL LOBO

A los tres cochinitos cazó el lobo

después de mil...

Graduación

En una escuela de sexo,aplicándose en los estudios, un alumno aventajado se gradúa con los más altos honores.

GRADUACION

Para lograr, sexuales, tus favores,

tomé un curso de joder muy avanzado,

pues no era cosa de dejar a un lado

el coño tuyo y tus demás primores.

Leí todo lo que eróticos autores

habían escrito y quizá experimentado,

incluido el Kama Sutra, practicado,

por quienes ya son grandes jodedores.

Aplicándome así, con gran derroche,

llegué, desde un oscuro noviciado,

a cerrar finalmente el áureo broche,

y aunque quedé rendido y deslech...

Los amantes en el paraiso (05)

Jodiendo a todas horas. Viviendo con una mujer ardiente como ella, no había momentos para descansar y nos entregábamos a nuestros placeres con toda la pasión de la que éramos capaces.

JODIENDO A TODAS HORAS

Nuestra vida en pareja venía transcurriendo sobre ruedas. Ya muy lejos habían quedado aquellos días en los que, obligado por la soledad, con su coño fijo en mi cerebro, tenía que recurrir a las necesarias puñetas para desahogar la presión de mis hinchados cojones, que no soportaba.

Desde que ella llegó, era otra cosa. Era la gloria eso de despertar por la mañana y encontrarla a mi lado, con ese maravilloso montón de pelos negros entre las piernas. Mi mano descendía y...

Los amantes en el paraiso (04: La hamaca)

Estando acostados en una hamaca, encontramos otras variantes para nuestros placeres.

LA HAMACA

La noche estaba bastante calurosa. El aparato de aire acondicionado se encontraba dañado y no fue posible encontrar un técnico que lo reparara, así que estar en la casa se hacía insoportable. Colgué una hamaca, ya que para ello había empotrado unos ganchos en la habitación y, desnudos como estábamos, nos metimos en ella. La curva de la hamaca nos obligaba a estar muy juntos los dos, quedando ella encima de mí, por lo que al poco rato ya tenía la verga bien parada, cosa que la ponía goz...