Abducción

Fue elegido, pero ¿para qué?

ABDUCCION

Despertó de pronto, extrañado de encontrarse en una habitación totalmente desprovista de muebles, a excepción de una cama, con todo lo necesario para hacer el amor. Inclusive, en la atmósfera se percibía un aroma que excitaba sus sentidos y hacía crecer su miembro a su máxima longitud y dureza.

Apenas podía recordar que hacía poco tiempo, ¿instantes?, ¿horas?, ¿días?, no podía precisarlo bien, había tenido lo que se le ha dado en llamar un "encuentro cercano de tercer tipo". Una...

Feliz vida de perro

A pesar de ser de especies diferentes, le di todo el placer que sólo podía encontrar con un macho bien dotado como yo.

FELIZ VIDA DE PERRO.

Aun tengo presentes los recuerdos de mi cachorrez, término que utilizo en equivalencia a la infancia de los humanos, cuando mi madre, una hermosa perra de color negro, alta y fuerte, aunque bastante descuidada, dada la mala vida que le había tocado vivir, parió una camada de diez pequeñas criaturas, incluyéndome, de colores variados, a quienes tenía constantemente pegadas a sus tetas, que no producían leche suficiente para amamantarnos a todos.

El instinto de supervive...

Satisfaciendo tus intimos deseos

Jodimos incansablemente y al final, tuve una merecida recompensa por mi dedicación.

PREMIO

Como nunca, esa noche te jodía,

una vez, y otra vez, cual la primera,

con el celo salvaje de una fiera,

hasta el fondo, tu coño arremetía.

Después de una vaciada, otra seguía,

pues mucha mi pasión de veras era;

la fiebre me atacó, de Primavera,

y gozoso a cada rato me venía.

Lograbas tu placer con las cogidas,

que llegaban hasta adentro de tu entraña.

contando emocionada las venidas.

Y al final conocí tu grata maña,

cuando...

Peculiaridades culinarias

Si se quiere disfrutar de una buena comida, se debe sazonar muy bien la carne.

SATISFACCION

Ya me he venido múltiples veces,

pero mis ganas no se han calmado,

aún mi carajo sigue parado

y tú, las nalgas, ahora me ofreces.

Voy a tratarte como mereces,

y tu culito, tan apretado,

he de dejarlo bien rellenado,

para que goces, si me obedeces.

Mueve tus nalgas, putona, aprisa,

mientras penetro, fiero, en tu ano,

este carajo que se desliza,

en un envite del que me ufano,

cuando dibujas una sonrisa

a cada paso...

La esquimal

Como las noches eran muy largas y la temperatura muy fría, había que calentar el iglú convenientemente.

ESQUIMAL

Un viaje al frío Polo haré algún día,

y una tribu esquimal ha de acogerme,

en un gélido iglú habré de meterme,

aunque sea la cama un poco fría.

Me cuentan que les da mucha alegría,

a la esposa entregar por complacerme,

y ella encuentra muy grato entretenerme

dejándome ensartar su sexual vía.

Aunque el buen esquimal, sólo una noche

deja que te la cojas varias veces,

sin que él participe en el derroche,

es algo que gozar puedes c...

Sin barreras

Humildes y altivas, inocentes y experimentadas, generosas y egoístas, fogosas y discretas, pero todas se doblegaron ante el poder de mi espada.

BARRERAS

Tu culo se resiste al ensartarlo,

pues no aguanta lo grueso de mi pene,

pero eso, chiquilla, no te apene,

pues podremos, en poco tiempo, ahormarlo.

Y para, de una vez, acostumbrarlo,

primero, de cabeza que se llene

y luego, poco a poco, que no frene

el paso del carajo, hasta tragarlo.

Tu culo ya en mi verga se me enreda,

buscando más completas sensaciones,

dejándola cubierta con su seda.

Y al sentirte invadida de emociones,

...

La nalgona

Tenía unas nalgas enormes, hermosas, blancas, ansiosas, que me incitaban a perforarle el culo una y otra vez.

LA NALGONA

Las oficinas donde trabajábamos, estaban separadas únicamente por un pasillo, y ya era costumbre que todas las mañanas pasara a tomarse un café conmigo, acomidiéndose a prepararlo y a servir dos tazas, para ella y para mí.

En lo que nos deleitábamos con la espumosa y caliente taza de café, conversábamos de nuestras cosas, en el trabajo y en el hogar. En esa forma me enteré que tenía apenas un año de haber enviudado, y su esposo había muerto en un accidente de tránsito, dejándola...

Juegos sexuales en el internado

Eramos jovenes, con los deseos a flor de piel y nuestra naturaleza fogosa nos obligaba a buscar la satisfaccion a como diera lugar.

JUEGOS SEXUALES EN EL INTERNADO

Después de los destrozos ocasionados por un huracán en la ciudad donde vivía, la escuela en donde estábamos por terminar el ciclo escolar, con el que pasaríamos a la siguiente categoría, quedó totalmente destrozada y hubo que pedir ayuda a las autoridades educativas de la ciudad vecina, para que nos aceptaran en una de sus escuelas y así pudiéramos terminar el curso.

Solidarios con nosotros, nos aceptaron en un internado, en el que no permanecíamos encerrados...

A falta de pan

Cuando se anda ganoso y no tenemos a mano una buena nalga, se pueden manipular otras opciones.

NEGATIVA

Temprano desperté, con muchas ganas,

y acaricié tus nalgas nacaradas,

que estaban, como en mármol cinceladas,

y a tus tetas, que fingían dos campanas.

Pero todas mis artes fueron vanas

y no pude mis ansias ver calmadas,

no quisiste que te diera de ensartadas

entre esas dos nalgas, tan deseadas.

Y, sin más, resignado me fui al baño,

en donde me froté la verga dura,

hasta que salió leche por su caño.

Y es que no pude más, pues la...

Calenturas estudiantiles

En la adolescencia, siempre andábamos con la vergas paradas, buscando coños que les calmaran las ganas.

CALENTURAS ESTUDIANTILES

Cuando me tocó estudiar el Bachillerato en otra ciudad diferente de donde hice mis primeros estudios, tuve que hospedarme en una casa de asistencia, en la que por un precio módico, se nos daba de comer y teníamos baño y lugar para dormir. El aseo de la ropa teníamos que contratarlo por separado y nunca faltaba quien se acomidiera a hacerlo, pues andaban a la caza de los estudiantes que requirieran de estos servicios.

Se hospedaban en la casa diversos tipos de estudi...