El valor extra de lo prohibido: mi primera vez
Era increíble cómo la inocencia de mis 18 añitos me había hecho conocer de un modo particular, una sensación totalmente novedosa hasta ese momento, y que me había brotado por los poros en aquel instante, tan solo ante la posibilidad de cometer ese pecado.
EL VALOR EXTRA DE LO PROHIBIDO:
MI PRIMERA VEZ.
Era increíble cómo la inocencia de mis 18 añitos me había hecho conocer de un modo particular, una sensación totalmente novedosa hasta ese momento, y que me había brotado por los poros en aquel instante, tan solo ante la posibilidad de cometer ese pecado.
El hecho aconteció el día en que era todo un acontecimiento en mi propia casa, ya que ésa era la primera vez que iba a hacerle un mandado a mi madre yo solito.
La tarea era por de...