Producto de mis decisiones: Cap 23 y 24

Final del viaje y vuelta a la rutina. Una rutina que Mario ansía y teme por partes iguales.

CAPÍTULO 23

Solo me quedaba confiar en que Ricardo no fuera tan hijo de puta.

Fui camino arriba aún más rápido que la primera vez, esperando que no estuvieran demasiado lejos y que no se terminara el camino. Por suerte era bastante largo y empinado, por lo que les tenía que alcanzar por narices si corría un poco.

Pero el camino terminó y volvíamos al campo a través, lleno de árboles. Sería mucho más complicado verles por ahí. No me quedó otra que seguir el mapa y avanzar, a ver si habí...

Mi experiencia con Marina

Una ex compañera de colegio casada y de paso.... cristiana

Cuando la conoci era la chica mas hermosa del curso, con 2 años era mi mayor, era timido en eaa epoca de colegio, pero ella ya temia ese pensamiento o la creencia de la fidelidad.

Paso mucho tiempo y pues me acorde de ella y por las redes sociales la ubique, habia cambiado, un poco rellenita, quiza los años y el matrimonio que quiza la consumio, pero me dio.gusto contactarme con Marina, no hablamos mucho puesto.que vagamente se.acordaba de mi y eso que le envie una foto en grupo de la epoca de colegio...

Empresaria de profesión, puta por vocación - 24

La historia de patricia, una madura empresaria, con unas fantasías sexuales desmedidas

Nota de autor:

#Quédate en Casa

CAPITULO XXI

CHACHA DE MI CHACHA Y MI MARIDO (6)

La verdad es que ahora si estaba realmente inquieta. Supongo que el miedo a lo desconocido, pero al margen de lo que había visto en las pelis pornos, una cosa es fantasear con eso, y otra ir a hacerlo.

La mujer me llevo hasta la entrada del cuarto en cuestión. De un armarito, sacó unas bragas.

“Póntelas con cierto cuidado. Son comestibles....

Por mis putas fantasías: capítulos 3 y 4

La relación entre Noé y Lorna está en un momento en que tiene que evolucionar. Por otro lado, una confesión sorpresiva de Leonardo podría cambiar el rumbo de las cosas.

3

Lorna no me dirigió la palabra en dos días, Martes y Miércoles. Y yo no sabía por qué. Entiendo que la había ofendido con el consolador y que la había hecho sentir una zorra, pero… ¿en verdad era para tanto? ¿Andaría en sus días susceptibles? Yo había dado por hecho que haberla descubierto masturbándose como una posesa había sido un parte aguas para nuestra relación. Entonces, ¿qué había pasado?

El jueves por la mañana no pude más y le dije:

—Perdóname, Lorna, no pensé que te fuera a o...

Un verano caliente - 2

Una aventura agridulce con dos hombres con los que tuve sexo y diversión.

PISCINA

Ese fin de semana de mitad de mes, vino mi marido a pasarlo con nosotros, y luego no volvería hasta finales, para recogernos y empezar las vacaciones. Estábamos acostados en la cama y mientras él me tocaba con sus manos, me pregunta.

  • ¿Qué tal te lo estás pasando?

  • pues aburrido, sobre todo por las noches. Quiero que estemos juntos pronto, te echo de menos.

  • ¿no llamaste a Ely? Sal algún día, ya queda poco hasta final de mes.

  • si, la llamé y estuvimos una noche por...

Experiencias infieles con Rocío

Ser padre te cambia la vida en muchos aspectos. Uno de ellos es que tu vida social se nutre de nuevas amistades. Así fue como conocí a Rocío en la guardería de nuestros hijos. Una atracción mutua desde el principio que desemboca en nuestro primer encuentro sexual.

El nacimiento de un hijo te cambia la vida. Por mucho que intentes hacerte una idea durante el periodo del embarazo de los cambios que se van a producir en tu día a día hasta que no ocurre el acontecimiento no eres realmente consciente. Una nueva personita acapara toda tu atención y aquello que se llamaba tiempo libre (que ya de por sí era escaso) deja de existir. Los primeros meses se pasan entre biberones, cambios de pañales, falta de sueño,… Salir de casa a pasear o hacer un recado supone más de una hora...

Nuevas sensaciones 6 (Mamen y Nico Libro 2)

Sigue la historia

—¿No será que no estás tan segura de no caer rendida ante un madurito?

—Estoy completamente segura, Nico —sonreía con determinación.

—Pues chica, no lo entiendo. A mí no me importa, a él menos. Y tú dices que manejas y controlas la situación… ¿Qué hay de malo fantasear un poco y echar un par de buenos polvos con eso? Sal un día con él…

—No hay nada malo, solo que yo no quiero… —Se encogió de hombros.

—Pues yo creo que no manejas la solución y que Javier te pone.

—No me vas a pi...

Producto de mis decisiones: Cap 21 y 22

Sigue el viaje y siguen las actitudes cuestionables de Mario. A otro día de playa, se le suma una excursión en parejas donde todo puede pasar.

CAPÍTULO 21

-Joder tío vaya susto. ¿Pero qué coño haces aquí?

Ahí estaba Ricardo, tumbado en la cama. Con la mano izquierda sujetando su móvil y con la derecha haciéndose una soberana paja. Ante mi estupefacción, así como la de mi mujer a quien se le escapó un “madre mía” que solo yo escuché, Ricardo siguió:

-No malpienses de mí eh. Joder es que llevo algunas horas sin follar, sin intimidad. Ya sé que no es el mejor momento y no es mi cama. Bueno es mi casa así que en realidad sí jajaj...

Por mis putas fantasías: capítulos 1 y 2

Un marido amoroso, pero infértil, una mujer cachonda, pero insatisfecha. Un entorno sexual de vaginas mojadas, vergas enhiestas y fantasías ocultas. ¿Qué podría salir mal?

1

A estas alturas de mi vida estoy completamente convencido de que uno mismo propicia sus desgracias, sus fortunas y hasta sus coincidencias. Siempre esperas algo mejor o peor para tu vida, e inconscientemente en la mayoría de las veces sueles terminar atrayendo aquello que más te perjudica.

Ahora mismo no sé si a mí me perjudicó o me benefició, el caso es que muchos de los sueños, siempre llegan a cumplirse. Aunque quizá no de la forma en que esperas.

Todas las parejas siempre temen a a...

Jugando con fuego (Libro 3, Capítulos 32 y 33)

Continúa la historia.

CAPÍTULO 32

María abandonaba la perfección y sensualidad del espejo en busca de un cargador para el teléfono móvil que hallaría en su maleta. Mientras, yo me preguntaba por qué había sido tan insistente con respecto al espacio que ella me demandaba para leer lo escrito por Edu, como si no supiera que no era la primera vez, como si no nos hubieran pasado cosas mucho más impactantes. Pero lo cierto era que aquello, sin alarmarme, me sorprendía; era sorpresa, no reproche, y llegaba a entender que ella in...