Perdi una apuesta

Perdí una apuesta con un amigo y tuve que emborrachar a mi pareja para que se durmiera y follar con mi amigo a un lado de mi pareja borracha.

Hola, este es mi primer relato y espero que les guste.

Me presento mi nombre es Veronica y tengo 34 años. Vivo en el norte de México y actualmente tengo pareja, alguien digamos básico aunque buena persona.

Un dia en mi trabajo entre la platica que teniamos un amigo y yo, salio el tema y me confesó que me tenía ganas, pero lo que me dejó impactada fue lo siguiente:

Carlos: se me antoja cojerte frente a tu pareja mientras está dormido.

Verónica: estás loco Carlos

Carlos: a poco n...

Un placer vendido

Un auto gris

Lo conocía hace varios años por internet, jamás nos juntamos en persona, pero hablábamos un montón, él me contaba sus intimidades y yo las mías, era un buen tipo, un poco vulgar para hablar pero alegre, siempre me hacia reír. Él nunca fue de mi tipo, un hombre de 1,70, tez blanca, ojos y pelo negro, no tenía barba ni bigote, siempre mantenía una contextura normal, no era delgado, pero tampoco  gordo,  no se ejercitaba, solo jugaba computador, en pocas palabras, era un tipo normal.

A pesar de que pasab...

Un verano caliente - 6

Un viaje inesperado a las islas y otra aventura excitante con un chico que me gustó.

CANARIAS

Acabábamos de regresar de las vacaciones cuando mi marido me anuncia que el lunes se va de viaje toda la semana, pero que ha pensado que podíamos dejar al niño con mis padres, el viernes por la noche cogíamos el avión a Las Palmas, él seguía su viaje el lunes y regresaba a otro viernes.

Me pareció perfecto, así que preparé dos maletas enseguida y el viernes noche dormíamos en un confortable hotel pegado a la playa de Las Canteras. Nos encanta esta ciudad, así que pasamos dos días estupe...

¿Te puedo pedir una cosa?

Castaña de bote, también conocía de su boca que negro vello habitaba en sus braguitas. Y mientras hablábamos, era capaz de decirme que en ese momento estaba ejercitando sus labios vaginales porque era sano y saludable o que esa misma mañana había follado con su marido.

Siempre me ha gustado esta mujer. Podría afirmar que primero me cautivó su forma de ser, su personalidad. Siempre ingeniosa, siempre capaz de sacar punta a cualquier comentario y una sonrisa ante cualquier contratiempo. Y siempre clara. Sentados uno al lado del otro en la oficina, fuimos ganándonos la amistad y la confianza mutuamente. Y con el tiempo, en gran parte por ese conocimiento y ese cariño, me empecé a fijar en su figura. No destaca por su estatura ni por su esbeltez, pero forma un conjunto ante e...

Jugando con fuego (Libro 3, Capítulos 36, 37 y 38)

Continúa la historia.

CAPÍTULO 36

Se marcharon y sentí algo que no entendía muy bien qué era. Parecía como una extraña necesidad de explicarme, de predicar a los cuatro vientos qué era aquello que estaba viviendo.

Me giré y vi a aquel chico que hablaba con María. A él lo veía de espaldas y más que una camisa parecía una enorme sábana azul lo que me impedía ver a mi novia. Me giré un poco y vi como charlaban y no me dio la sensación de que ella tuviera el más mínimo interés en que aquella conversación se alargase. Otr...

Por mis putas fantasías: capítulos 23 y 24

Las crudas y terribles revelaciones de Paula serán el artífice para que Noé decida entre salvar su matrimonio o mandarlo todo a la mierda. Entrega semifinal

23

Cuando los rayos de sol inundaron mi habitación, me vi tendido en la comodidad que me prodigaba mi cama. El simple aroma herbario que tanto gustaba a Lorna, y del que estaba penetrado cada rincón de nuestro apartamento, me confirmó que estaba allí, en nuestro lecho matrimonial.

Mis ojos estaban renuentes a clarificar mi vista, varados en una pérfida imagen que pretendía olvidar; y mis sentidos, dueños de mi sosiego y esperanza, todavía permanecían escondidos debajo del fango del dolor y la...

Mi amiga casada

Será capaz mi amiga casada y fiel de caer a las insinuaciones de un cabrón mujeriego¿? cuando ella es plenamente sabedora de que el tipo la busca solo para llevarla a la cama......

Segumda parte de mi relato anterior

Pasaron las semanas y Reynaldo y mi amiga puta dejaron de verse, casualmente cada vez era más atento con mi amiga casada, todos sabíamos sus intenciones, pero todas estábamos seguras de que las cosas no pasarían de ahí, la primera experiencia fue hasta cierto punto sorpresiva pero cuando supimos lo pasó, no nos extrañó en demasía, los dos eran cachondos y perversos, la pasaron bien y ya está.

Mi amiga casada sabía manejar muy bien este tipo de cosas era un muj...

Por mis putas fantasías: capítulos 21 y 22

El deseo, la pasión, los celos y el orgullo son el detonante para que la relación matrimonial entre Lorna y Noé llegue a lo más álgido de sus vidas.

21

Eran las 3:45 de la madrugada cuando me levanté, según me enseñó mi teléfono celular con unos pequeños números blancos que estaban delante de donde Lorna y yo nos exhibíamos en una selfie (en la que aparecíamos dándonos un pico) que nos habíamos tomado en nuestra última visita al cine

«La hora del diablo» pensé sin pensar, agitado, con la garganta seca y mi lengua pegada en el paladar.

Volví a constatar en el baño, en mi cama, debajo de la misma, en el sofá que estaba frente a un...

Nuevas sensaciones 7 (Mamen y Nico Libro 2)

Continúa la historia

Y por supuesto que incumplí aquella promesa. En una semana, en efecto, nos íbamos a Ibiza. Íbamos a estar siete días nosotros solos, sin amigos, ni familia, ni conocidos. Queríamos descansar y disfrutar el uno del otro. Mamen luego se iría unos días a casa de sus padres en Alicante y yo con mi madre, viuda, que se pasaba los veranos en la sierra, en un chalet en El Escorial.

Incumplí esa promesa el día antes de salir para Ibiza. Javier daba una fiesta, o una reunión de amigos como él las llamaba y, có...

Algo mas que un sueño

Relato a medio camino entre la infidelidad y la fantasia.

Te veo casi todas las mañanas en la parada del autobús. Inalcanzable y a la vez cercana en la distancia. Yo tengo un matrimonio feliz, con sus cosas de vez en cuando. Pero tú me calaste con no se aun el que. Jamás había pensado en ser infiel a mi mujer, pero cuando te vi varias veces, empezó a ser un “quizás”. Remoto pero probable. Te observo como esperas la cola, subes y te quedas de pie, agarrada en una de las barras. Ahí es donde te aprecio realmente, al son del movimiento del vehículo: como tensas las p...