La chica de la limpieza
Una historia real
Clara venía a limpiar a casa un día a la semana. Aunque era una mujer de muy buen ver, de unos 38 años, yo nunca le había prestado atención en el aspecto físico, pues ella hacía su trabajo y yo estaba a lo mío.
Pero aquella mañana pasó algo distinto. En todo mi círculo de amigos y conocidos se sabe de mi liberalismo y de mi claridad para decir las cosas llamándolas por su nombre, y aquella mañana me había contactado una amiga por Messenger diciéndome que tenía muchas ganas de una sesión de Cibersexo c...