Yo soy la jefa 3
Trataba de follarme con la lengua, me la metía todo lo que podía y de vez en cuando se paraba a lamerme el clítoris lo que me exitaba aún más y me arrancaba verdaderos gritos de placer que amortiguaba con una almohada.
Pasé el día dando vueltas por el centro de Madrid, había como siempre un montón de cosas por ver y aún más sitios en los que comer y pasar el rato. Sobre las ocho de la tarde y con un puñado de bolsas de compras cogí un taxi para volver al hotel.
Cuando llegué subí directamente a mi habitación y me dispuse a ordenarlo un poco todo y a revisar mi email y mi facebook, en esas estaba cuando alrededor de las 22h Carlos me envió un whatsapp: - El soldado ha sido capturado, necesita que lo liberes. Inmediat...