Dominame. MI AMO.
Mi primer relato sobre D/s. Mi descubrimiento. Mi fantasía. Mi liberación.
Él la tomó de la cintura y se la acercó con furia. Ella debía entender que solo él sería su dueño. Ese era su deseo. Ella deseaba tocarlo, rozar su miembro enardecido con la punta de su dedo, enredar su lengua en su zona mas sensible. Pero él dijo NO.
Ella obedeció. Nunca obedecía, pero esa noche decidió obedecer. Dejó caer su cabeza hacía atras. Dejó amarrar sus finas muñecas, y quieta e inmutable, se entregó a un palcer silencioso.
Un par de dulces gemidos le brotaron de la comisura de l...