Mis inicios en la humillación

Mi primera vez en todos los sentidos, como alguien mucho mayor me desvirga mis agujeros y realiza mi primer humillacion publica, inciando asi mi fascinacion en la humillacion y sumision.

Hola a todos, este es mi primer relato y me gustaría empezar por mi primer experiencia en todos los sentidos.

Todo comienza con una breve descripción de mí. Mi nombre es Kathya, tengo 24 años, soy de México, alta, delgada, piel blanca, cabello castaño oscuro, ojos café, de mis medidas no pregunten ya que no uso ropa interior desde los 15 años….

Escogí mi primera experiencia debido a que me gustaría que todo mundo se entere de mi vida sexual, y empieza así

Yo iba en una escuela,...

Búsqueda y Renuncia (1)

Así me comprometo a cada semana entregar un nuevo relato hasta que este narrador encuentre a la mujer madura que cristalice todos sus sueños.

Búsqueda y Renuncia (Capítulo I)

1.- Me haré llamar Edipo Masoch, soy un joven de 23 años que radica en México, Distrito Federal y me siento particularmente atraído hacia las mujeres maduras, en esta serie de relatos desfilarán seis personajes principales que representan mis principales fantasías, son tres parejas compuestas por madre e hijo, Patricia y Eduardo, Penélope y Alberto y por último Elizabeth e Iván, estas tres mujeres sedujeron a sus respectivos hijos cuando ellos apenas eran unos ad...

El oasis de Jufrah (3)

Ya es la tercera vez que envío este capítulo y no me lo publican. No sé qué anda pasando...

EL OASIS DE JUFRAH (III)

  1. La decisión de Anuska

En el paradisíaco oasis de Jufrah, al norte de la Arabia Saudí, dos de las esclavas del Sheik Abdul Nassim Rahman continuaban amenizando las horas en el serrallo, confiándose las distintas peripecias que las habían llevado al harén del poderoso jeque.

—Entonces yo enteré que muchacho Nichita Istrati y señor Marin Blaga solicitaban mi mano —dijo la rubia Anuska, en su imperfecto castellano, a su amiga Isabel—. Yo sólo tenía catorce años...

Ariadna una asistenta de armas tomar (6, final)

Termina la historia de sumisión entre la señora Susana y la orgullosa de su asistenta Ariadna, que la domina a su antojo. Aunque ahora también su marido sufrirá las consecuencias.

Esta es la historia de una pareja, Marcos y Susana. Dirigiendo Marcos una empresa, podían permitirse contratar a una asistenta, Ariadna. Con el tiempo la asistenta Ariadna se las ingenió para que su jefa, Susana, hiciera sus tareas algunos días, a cambio de que la asistenta le ayudase a elegir el vestuario y el maquillaje, algo en lo que era especialmente buena. Un día en que realizaron este intercambio de tareas, en que la asistenta se hacía pasar por señora y la señora por asistenta, un falso inspe...

La historia de Claudia (7)

Esa noche de sábado Blanca cenó atendida por Claudia, después le dio una buena nalgueada sobre sus rodillas por el mero placer de hacerlo, la hizo ir al baño para que orinara y finalmente se la llevó desnuda y en cuatro patas hacia la despensa. -¡No, señora! ¡No me encierre! ¡Por favor! –suplicó la joven advirtiendo lo que le esperaba. Blanca, sin inmutarse, abrió la puerta, la empujó dentro y le dijo: -Ahí te quedás hasta mañana.

La historia de Claudia (7)

Esa noche de sábado Blanca cenó atendida por Claudia, después le dio una buena nalgueada sobre sus rodillas por el mero placer de hacerlo, la hizo ir al baño para que orinara y finalmente se la llevó desnuda y en cuatro patas hacia la despensa.

-¡No, señora! ¡No me encierre! ¡Por favor! –suplicó la joven advirtiendo lo que le esperaba. Blanca, sin inmutarse, abrió la puerta, la empujó dentro y le dijo:

-Ahí te quedás hasta mañana. –e inmediatamente fue e...

En mi jaula

En mi jaula espero ansiosa a que mi amo regrese, para que me de placer, para por fin recibir mi justo castigo.

Mi amo me tiene aquí encerrada en mi jaula, desde hace varios días. Por un lado me vuelvo loca de aburrimiento pero por el otro estoy feliz porque solo ha dejado la comida justa. Adelgazaré, eso espero, esa es la principal razón de haberme convertido en una perrita, la humillación de andar caminando entre la gente con mis inmensas lonjas, que mi infame glotonería me había impedido disminuir. Aquí estoy mejor, protegida entre estos barrotes del escarnio público, del "no estás gorda" cuando yo sé que sí...

La historia de Claudia (6)

Unos minutos después, ya recuperada del grato agotamiento en que la sumiera el uso sexual que había hecho de Claudia, la señora se dio una ducha y regresó al dormitorio en chinelas y desnuda bajo la bata. Llevó a Claudia de una oreja a la bañera y comenzó a manguerearla con agua fría. La temperatura no era demasiado baja, pero sí lo suficiente como para que la joven se sintiera aterida. -¡Aayyy, por favor, señora! ¿Qué está haciendo? ¡Tengo frío!. –se atrevió a protestar. - Estoy bañándote como se baña a los animales. Y no sigas ladrando porque te doy con el rebenque –contestó Blanca impertérrita.

La historia de Claudia (6)

Unos minutos después, ya recuperada del grato agotamiento en que la sumiera el uso sexual que había hecho de Claudia, la señora se dio una ducha y regresó al dormitorio en chinelas y desnuda bajo la bata. Llevó a Claudia de una oreja a la bañera y comenzó a manguerearla con agua fría. La temperatura no era demasiado baja, pero sí lo suficiente como para que la joven se sintiera aterida.

-¡Aayyy, por favor, señora! ¿Qué está haciendo? ¡Tengo frío!. –se atrevió...

Mía (3)

Will y su esclava visitan EL JARDÍN DE LAS DELICIAS, paraíso del vicio y la depravación.

La enorme verja de hierro forjado se abre y la niebla densa que impedía ver el interior se disipa.

El espectáculo es sobrecogedor. Es realmente el panel central de "El Jardín de las Delicias", la obra del pintor renacentista El Bosco, pero mucho más sórdido, más depravado. Por donde quiera que mire, Will ve a hombres practicando sexo con mujeres con collarín ante la vista de todo el mundo. Parejas, tríos, grupos de cuerpos desnudos moviéndose a ritmo frenético. Una verdadera orgía de gritos...

La historia de Claudia (5)

Blanca observaba muy interesada el trabajo de Inés sobre la cabellera de Claudia, que iba reduciéndose cada vez más en su volumen mientras la joven permanecía indefensa e inmóvil con los ojos cerrados y sus puños sobre el pecho bajo el peinador de tela celeste, resignada a su suerte.

La historia de Claudia (5)

Blanca observaba muy interesada el trabajo de Inés sobre la cabellera de Claudia, que iba reduciéndose cada vez más en su volumen mientras la joven permanecía indefensa e inmóvil con los ojos cerrados y sus puños sobre el pecho bajo el peinador de tela celeste, resignada a su suerte.

De pronto Inés dijo dirigiéndose a Blanca:

-¿Sabés? Me gustaría tenerla uno de estos días. ¿Puede ser?

-Por supuesto que sí. –contestó Blanca. –Cuando vos quieras me ll...

La iniciación

Soy sumisa. Acabo de encontrar un Amo y esta es mi historia.

Mí querido Amo y Señor:

Por fin llego el día. Fue mi iniciación real como sumisa. He estado esperando este momento mucho tiempo. He tenido la suerte de encontrar un Amo estupendo con quien me compenetro completamente.

Nos vimos a las 10:30 y nos fuimos a un hotel. Reconozco que cuando llegamos al hotel estaba tranquila, pues estuvimos desayunando y charlando hasta que estuvo lista la habitación. Pero una vez que llegamos a la habitación me encontraba algo nerviosa y tensa. Mi Amo primero me...