Fin de curso (2)

2º parte del relato María descubrirá el verdadero alcance de los planes de Juan y como su vida no es como creía.

María respiraba agitádamente, el corazón le latía a cien por hora y cada dos por tres se giraba para mirar por el cristal de atrás, creyendo ver de nuevo aquellas miradas vidriosas o a el...

-¿Esta bien señorita?- preguntó el taxista de repente, dándole un buen susto a la tensa chica.

-...Si, si, solo tengo prisa- respondió ¿qué podía decirle?

-Ya queda poco, no se preocupe- replicó el conductor mientras giraba por una esquina, María pudo ver su casa, un chalet adosado situado en un...

Perversión facultativa (y 6) Re-escrita

De acuerdo, reconozco mi error: Final precoz y socorrido, un capítulo para olvidar. Siguiendo vuestros consejos re-escribo el final de la historia, y espero, esta vez si, ser consecuente con esta.

Rubén no reconocía a Adriana, durante años había sido una pacata reprimida y en ese instante se comportaba como una puta ansiosa, dudó, pero se dijo que no dejaría pasar aquella ocasión ni por todo el oro del mundo. Mientras se percibían claramente las voces joviales de los invitados en el salón Adriana sacó el pene de Rubén y lo metió en su boca mientras le acariciaba los testículos quedamente. El joven se irguió y apoyo la espalda contra la pared evitando perder el equilibrio, no daba crédito a la e...

Fin de curso

Una alumna va a celebrar el final del instituto, pero la fiesta no es como se esperaba...

Anochecía, a medida que el sol se ocultaba la ciudad despertaba, se animaba y las céntricas calles comenzaban a llenarse de jóvenes dispuestos a pasarlo bien. María era una de ellas, aunque no lo estaba pasando precisamente bien en ese momento.

"Joder" pensó mientras miraba el reloj "yo, la única que ha sacado matrícula de honor llegando tarde a la fiesta de graduación". Se apresuró en dirección al restaurante en el que toda su clase celebraba el fin de su último año de instituto con una cena y...

Perversión facultativa (y 6)

Desenlace final. LA ORGIA

Rubén no reconocía a Adriana, durante años había sido una pacata reprimida y en ese instante se comportaba como una puta ansiosa, dudó, pero se dijo que no dejaría pasar aquella ocasión ni por todo el oro del mundo. Mientras se percibían claramente las voces joviales de los invitados en el salón Adriana sacó su pene y se lo metió en la boca mientras sujetaba sus testículos con la mano. Aquella situación morbosa, el riesgo inminente de que alguien entrará allí y los sorprendiera hizo que el joven se ex...

Perversión facultativa (5)

Aunque escribí que está sería la última entrega y como no quiero aburrir al personal pospongo el final a una más, pero sólo una. Aquí Adriana y Laura junto a Raquel y a José preparan la fiesta final. No os la perdaís.

Raquel sostenía una fotografía y se la mostró a su hermana. Aquella noche habían dormido muy poco y ahora, los cuatro desayunaban semi desnudos en la cocina, con la máxima naturalidad del mundo, dando buena cuenta de varias tostadas con mermelada y té o café. José estaba especialmente exhausto y se preguntaba si algún día sería capaz de repetir la proeza de llegar a provocar a las chicas más de diez agradables orgasmos.

— ¿Quién es Raquel?

La niña le alcanzó la fotografía.

—Se llama A...

Perversión facultativa (4)

Penúltima entrega de la serie en que Adriana invita a sus hermanos a compartir con ella y con Laura un excitante fin de semana.

Adriana habló con sus padres para que autorizaran a los niños a pasar el fin de semana con ella y con Laura. José y Raquel no eran los mismos desde aquella tarde en el apartamento de su hermana, algo había cambiado en sus cerebros y ya nada impedía que apagaran sus anhelos amándose entre ellos. Desde entonces aprovechaban cualquier ausencia de sus padres para satisfacer su desenfrenada lujuria. Bastaba que se quedasen solos en la casa para que se encerraran en la habitación de Raquel a copular como an...

Perversión facultativa (3)

Adriana y Laura empiezan a percibir las cosas de otro modo.

Habían transcurrido varias semanas sin que ninguna de las dos hubiese vuelto a visitar al Doctor Malevich y no obstante, en sus más íntimos pensamientos, ambas se sentían presas de aquel monstruo. Recordaban vagamente las sesiones impartidas por el y su última visita a su apartamento cuando José y Raquel, los hermanos de Adriana, estaban allí; y aún confundiendo los recuerdos, sin duda inducidas por la maldita química del medico, afloraban en ellas sentimientos de impudor y repugnancia mezclados con s...

Perversión facultativa (2)

Nuevas victimas para Malevich. Sondeando en el incesto.

Friederik se acomodó en el sofá. Había venido solo y había sorprendido a Adriana y a Laura en plena visita de Raquel y de José. Cuando sonó el telefonillo y supieron que se trataba de el un halo de terror cruzó sus mentes. Recordaban vagamente el último encuentro con el doctor y sabían que este durante, una indefinida sesión, había llegado a poseer sus mentes y las había obligado a realizar actos obscenos. Ambas sabían que no existía otra alternativa que franquearle el paso y Laura urgió a sus hermano...

Perversión facultativa (1)

Lo que puede ocurrir cuándo dos jovenes incautas acuden a un psicologo dispuesto a experimentar terapias.

Adriana y Laura mantenían su amistad desde hacía más de seis años, pero solo hacía dos que habían decidido alquilar un apartamento a escote. Ambas tenían veintidós años y eran muy hermosas; Adriana, algo más alta, cursaba el mismo curso de derecho con Laura y las dos habían hecho sus pinitos en pases de modelos organizados por firmas de diverso prestigio. Aquella tarde habían desestimado a acudir a uno de ellos, porque pensaban que aquella actividad esporádica corría el riesgo de ocuparles demasiado...

Maestros de la Perversión 3: Duelo

El desenlace a una trilogía empezada tres años ha. (Se recomienda leer con tiempo)

Tres años contemplaban la alianza forjada por dos hombres cuyo único nexo en común era una vocación compartida, si bien cada uno movido por intereses muy dispares. En todo ese lapso mucho había cambiado; aquel frívolo pasatiempo original había sido reemplazado por el vigoroso negocio actual, incluso a pesar de la clandestinidad inherente al oficio. La clientela era variopinta, aunque existía un denominador común entre todos ellos: un colosal poder adquisitivo.

La dicha no era completa. El virtuo...