Recibiendo mi merecido (2) El padre de mi amiga.

Elena me invita a pasar el fin de semana en casa de su padre. ¿Podré resistirme a un hombre maduro calmando mi calentura con otros métodos, o sucumbiré a sus encantos?

Tras experimentar tan intensamente con el conductor del bus, quedé trastornada. Por primera vez en mi vida no me había sentido tan vacía, y así era literalmente: mi boca echaba en falta su erección suculenta, mi coño añoraba esa vigorosa follada con la que fue premiado, y mi ano se abría reclamando ese mazo de carne que lo había partido sin piedad.

De noche, empapaba la sábana en sudor y flujos recordando esos momentos de plenitud sexual y no podía más que encadenar un pajazo tras otro, entre suspiros...

Recibiendo mi merecido. El conductor del bus

Tenía la esperanza de que un chico de mi edad me desvirgara algún día. Eso era lo convencional y lo que se esperaba de mí, pero todo se torció por culpa de mi calentura viciosa y de ese conductor de autobús maduro...

Empieza el curso escolar y siento nostalgia de esa época y del tiempo que pasé en la Facultad. Me acuerdo del primer año, compartiendo piso de estudiantes y me veo en ese retrato:

Mis dedos buscaban el botón de mi clítoris mientras dibujaba esos cuerpos obscenos. No eran cuerpos adolescentes ni esbeltos, sino formas rotundas con largos penes erectos. Retocaba esa desnudez con un discreto manto de vello mientras apretaba la punta del lápiz hasta que se rompía... «¡Cerda!», me gritaba a mi misma sin...

Voy a ir al infierno

Leer esto os supondrá acompañarme a tan lamentable destino, pero...

... tranquilos. Mandarlo a 10 de vuestros amigos o parientes más queridos será una penitencia que os llevará a la redención. Adaptable a cualquier formato musical, aunque lo que más le pega creo yo que es el rap:

Rezo a 37 grados Celsius

Ya llegó el santo padre, buenos madrileños,

vino p'aclararnos los misterios de gozo;

lo intentaron antes, con gran dosis de empeño,

el Horatio, el Grissom y un curita del Pozo.

Hermosas casullas

te ponen las monjas,

y repar...

Cenicienta. Versión canalla, sin hada y para malos

Hermano Mayor llega a casa de una sumisa cenicienta y de sus dos libidinosas hermanastras. ¿Podrá reconducir la situación o sucumbirá a la depravación de ese hogar? Todo un reto para Roberto Candiles Sobado, el conductor del programa.

DEPRAVACIÓN TRAS EL PLADUR

Sonia y Arturo intentan seguir los diálogos de los actores leyendo sus labios. Emiten su telenovela favorita como cada viernes, pero las vecinas arman tanto ruido tras el pladur, que no oyen palabra. -¿Por qué se hipotecaron con ese adosado y no montaron una yurta mongola en el huerto del abuelo?-. Arturo no tiene respuesta para eso, pero golpea el tabique que responde con el sonido hueco de las construcciones precarias, y le vuelve a dar una y otra vez con el puño, infr...

No sea tan mala conmigo, enfermera

No era una exploración agresiva, pero tampoco exenta de riesgos. Soy bastante hipocondríaco y había imaginado todo tipo de efectos secundarios, pero ninguno como ese...

-¿ Paco Virgen ?

-Sí, soy yo; pero llámeme Poko Virgen, por favor. Po rfirio Ko ldo Virgen Martínez es mi nombre completo -le replico puntualizando; pensando en que por qué no asumir mi identidad al completo si probablemente muera en esa prueba.

-Perdone, señor Poko . Le estábamos esperando. Pase por favor, entre ahí y desnúdese; reloj, pulseras, anillos y medallas si las lleva, y vístase esa bata. Los calcetines no se los quite, no hace falta. Luego, pó...

Nunca digas que eso no es amor

Esta historia es un homenaje a todos los amores imposibles, incomprendidos. Pasiones tabú que superan las barreras que la sociedad impone. Este relato pretendía ser una parodia de "El amante de Lady Chatterley", pero está claro que se torció desde el primer momento.

La duquesa de Baba, acerca su rostro al espejo. Es una pieza que le encanta; más por las picaduras del azogue que distorsionan el reflejo de su cara octogenaria, que por su calidad artística. Es arriesgado chutarse bótox con un campo de visión tan limitado, pero no soporta contemplar su faz caballuna en toda su dimensión, coronada por esa mata de pelo cardado.

«Tú eres mi caballito de mar» le dice siempre su novio, Alberto. A veces se pregunta si en verdad la quiere; y en el caso de que así sea, ¿la v...

Quien bien te quiere, te hará llorar

No sé si el refrán se ajusta a lo que me pasó. Lo cierto es que tras llorar como una mujer, gocé como una perra.

El tren surcaba el paisaje suburbano, una sucesión de solares abandonados, polígonos industriales y casitas pareadas; y el recuerdo de Agustín me golpeó como lo hacía siempre, cuando menos lo esperaba y con la misma saña que lo venía haciendo desde el día de su muerte. Cerré los ojos para no ver esas casitas donde habíamos soñado instalarnos y que ya no eran más que un espejismo doloroso.

Había enviudado hacía un año y, tras el desconcierto inicial en que me había sumido la repentina muerte de mi mari...

Paja gustosa y a la carta

Si el saber no ocupa lugar; el placer, menos. De ocuparlo, uno se afloja en la pila del baño, le da al chorro del agua y se acabó el problema. A vuestra salud.

Ayer me hice una paja, bueno... y quién no se la hace de vez en cuando o seis al día si puede? Casi nunca me masturbo con material porno a no ser que sean imágenes fijas, fotos morbosas que captan ese momento intenso, esa expresión sublime congelada en esa cara que dice más que todas las folladas y corridas que parió madre desde que se inventó el fotograma. Como esos edredones raros, patchwork o como se llamen, que las polillas de mercería se dedican a coser en las trastiendas; pego en mi mente retorcida es...

Diario de Cocó (2) Ensartada en la estación

Olegario se convirtió en Cocó y el mundo -indiferente a nuestro ir y venir- siguió dando vueltas como siempre. Pero yo quería saber más de ella y de su extravagante vida:

Tras el funeral de mi tía abuela Cocó, volví un par de veces a su apartamento. Debía decidir que hacer con sus efectos personales antes de que venciera el alquiler del mes corriente. Mme Clodette (97 años), su vecina y amiga, estuvo encantada de quedarse con algunos de sus vestidos y sombreros, y se los probó allí mismo, contorneándose frente al espejo del armario con ese descaro ingenuo que da la senilidad, parecido al que muestran los niños. Incluso se atrevió con los zapatos de tacón, ejemplares de autén...

Emergiendo de la crisis con el sexo

¿Tienes hijos, estás en paro, los vecinos no te saludan porque no pagas las cuotas de la comunidad y vas a perder la casa de un momento a otro? El gobierno por fin responde con eficacia a tus problemas.

  1. Marisa sale del aparcamiento de la gran superficie, ese tramo de asfalto troceado como si fuera una tarta de cumpleaños. A, B, C ..., una letra adjudicada a cada pedazo donde los clientes pueden aparcar tranquilos para descargo de su memoria. Siempre intenta hacerlo en la zona delimitada por la letra P , le sugiere las palabras P aco, p sicosis y p erra vida, y le es más fácil ubicarse. Repasa mentalmente la compra preguntándose si ha olvidado algo. Las 25 cortinas d...