Juego de seducción

Una nueva aventura de pasión y seducción de los vampiros, Mathew y Gina.

JUEGO DE SEDUCCIÓN.

La noche se oscurece y los primeros rayos de la luna entran por la ventana, rozando mi cara. Abro los ojos, miro a mi lado y allí estás tú, mi dulce Mathew, mi fiel amigo, ése que siempre está, que escucha mis ansias y deseos, mis alegrías y mis penas, el que sabe más que nadie de mí, conoce mis íntimos secretos. Te observo mientras espero que despiertes. Me encanta ver tú cara relajada y tranquila mientras duermes. Y me encanta ver como abres los ojos y me miras desde tu...

Mi perverso favorito

Un canto de pasión para mi perverso favorito.

(Tú sabes que es para ti, mi perverso favorito)

MI PERVERSO FAVORITO.

Tú eres mi perverso favorito,

Ese que hace reales mis sueños escondidos,

Ese que a la luz de la luna

Me ama hasta dejarme derretida.

Ese que me quema las entrañas,

Haciéndome enteramente suya.

Tú eres mi perverso favorito,

El que me ama como nadie me ha amado,

Invadiendo los lugares que nadie ha invadido,

Quemando los deseos que siempre he deseado.

Ese que me hace...

El primer día (3: Amandonos)

Una historia de amor, deseo y pasión.

EL PRIMER DÍA (3º PARTE, AMÁNDONOS).

Traté de no darle más vueltas al asunto y dejar que los acontecimientos siguieran su curso. Si tenía que pasar algo el tiempo lo decidiría. Yo estaba bien con aquella situación, y creo que Pierre también, porque seguimos así durante los siguientes meses y nunca me pidió que dejara a mi marido. Y se lo agradecí mucho. Aunque debo reconocer, que me sentía un poco egoísta, amando a dos hombres a la vez.

Pierre era un sol, por eso cada vez se hacia más ...

El primer día (2: Sintiéndonos)

Segunda parte de esta historia de deseo, amor y pasión.

EL PRIMER DÍA (2º PARTE. SINTIÉNDONOS).

Pasé la noche pensando en él, daba vueltas y más vueltas en la cama y repasaba una y otra vez lo sucedido. Veía su cara de excitación mirándome y el deseo de sus ojos mientras me hacía el amor, y no podía dejar de pensar que había disfrutado más de lo que jamás lo había hecho. Y lo peor de todo es que me moría de ganas por repetir, por estar otra vez entre los brazos de Pierre y ser suya otra vez. Aquello era una locura, sentirme tan atraída y enamorad...

El primer día (1: Conociendonos)

Una historia de amor, deseo y pasión.

EL PRIMER DÍA (1ª PARTE. CONOCIÉNDONOS)

Era mi primer día de clase. Estaba muy nerviosa  y desorientada, porque empezar a estudiar una carrera a los 33 años, es algo que impone bastante, sobre todo sabiendo que tendrás que compartir la clase con gente  de entre  18 a 21 años. Pero estaba decidida a hacerlo, no quería llegar a los 90 años sin haber cumplido uno de mis sueños.

Y allí estaba yo, como niña con zapatos nuevos, con mis libros en la mano y más nerviosa de lo que nunca antes ha...

Muerte

Su sexo estaba ya erecto, altivo entre sus piernas. Lo así con una mano y cerré mi boca sobre él. Empecé a lamerlo e inmediatamente Oscar comenzó a gemir.

MUERTE

Vivo rodeada de muerte, pero la muerte es mi vida y sólo por ella y para ella vivo. La muerte es mi noche y la noche se envuelve en mi vida cada día, dándome una razón más para seguir, para andar sobre el filo de la navaja desafiando a la muerte y convirtiéndola en mi vida cada noche. La luna llena es la única luz que alumbra esa muerte, que tras de mí deja un reguero de sangre.

Muerte y sólo muerte, pero vida a la vez, mi vida, mi razón para existir, para seguir aquí.

Aqu...

El sexo a través de la historia

En el antiguo Egipto, el amor físico era algo natural, no había ningún tipo de prejuicios ni sentimiento de culpa. La desnudez era algo normal, hasta el punto de que la mayoría de mujeres iba ligera de ropa o con tejidos semitransparentes que dejaban poco margen a la imaginación.

EL SEXO A TRAVÉS DE LA HISTORIA.

El sexo no siempre ha sido igual, no siempre se ha mantenido oculto como un tema tabú, hubo una época en la historia del hombre en la que fue algo normal, libre y sin prejuicios.

Por ejemplo, en civilizaciones como la mesopotámica , el sexo era una religión que debía practicarse en el templo, donde cientos de sacerdotisas de la diosa Belit-Ishtar se entregaban a los fieles. Estos acercándose a las sacerdotisas, les formulaban el deseo y la cópula...

Los juego de Aecio y Kacena

Las manos de Kacena se deslizaron hasta la coraza de él y se la desabrochó sin dejar de mirarlo a los ojos. Fue quitándole todas las prendas de una en una, hasta que estuvo desnudo.

LOS JUEGOS DE AECIO Y KACENA.

Panonia era un territorio revuelto por aquellos días, había caído ante el poder de los bárbaros. Kacena y su ejercito habían acampado cerca de la ciudad de Aquincum, tras vencer al último contingente romano que quedaba en aquellos contornos.

Era ya media tarde, cuando Kacena decidió ir a dar una vuelta con su caballo por aquellos bellos parajes, para inspeccionar el territorio. De repente, vio a algunos de sus soldados ante un barranco, con un romano al que...

Contaré las horas

Le quito la camisa y él acerca su boca a mi cuello, me muerde, me besa y yo me estremezco, sigue chupando mi cuello.

CONTARÉ LAS HORAS.

Camino hacía él. Esta sentado en su silla de despacho, frente al ordenador y sé que ni siquiera imagina que estoy aquí, que paso a paso me acercó a él, que poco a poco estamos más cerca de lo que nunca soñó.

Y hoy su sueño se hará realidad. Lleva tiempo pidiéndomelo, suplicándome que nos veamos, que le dejé sentir mis labios sobre su boca y hoy he decidido hacer realidad ese sueño. Por que él me lo ha pedido, pero también porque me lo pide mi cuerpo y cuando mi cuerpo...

¡Maldito cabrón!

y por enésima vez me partirá el alma, me romperá el corazón, hará que le odie y que grite al viento: “¡Maldito cabrón!”.

¡MALDITO CABRÓN!

Esta allí, frente a mí, al otro lado de la barra, sin atreverse a mirarme a los ojos. Y me duele su indiferencia, me duele que parezca que nada de lo que hemos sentido le importe, que parezca como si para él hubiera sido un terrible error. Para mí no lo fue, jamás me arrepiento de nada de lo que siento, y sentí amor por él, ¿cómo puedo arrepentirme de eso?, lo sentí, no puedo negarlo, forma parte de mí y de mi corazón. Sé que era imposible, muy imposible, pero no por eso deb...