Mi gimnasio
Nada más verla ya sintió una atracción fatal por ella... en la ducha lo intentará.
Después de mi primera experiencia lésbica en el centro estético, me quedaron ganas de probar otra vez con una mujer distinta, temiendo al mismo tiempo ser rechazada por una mujer heterosexual, pero pensé que valía la pena intentarlo. Como ya he comentado anteriormente, voy a cada día al gimnasio, me encanta mantenerme en forma, y solo puedo ir de siete a ocho de la mañana, como podéis imaginar no hay nadie. Pero uno de esos días había una chica que no había visto anteriormente, estaba en la sal...