Las cinco amigas (25)

Era un hombre que debía estar en sus primeros treinta, algo más joven de mi verdadera edad... o al menos la que tenía cuando era varón. Medía en torno al metro setenta y cinco y no pesaría más de setenta kilos. Carecía del acusado tono muscular de Alberto o del actor porno.

***Vigésimoquinta parte*****

Era un hombre que debía estar en sus primeros treinta, algo más joven de mi verdadera edad... o al menos la que tenía cuando era varón. Medía en torno al metro setenta y cinco y no pesaría más de setenta kilos. Carecía del acusado tono muscular de Alberto o del actor porno. De hecho, era más bien de aspecto endeble. Al menos, por comparación con lo que conocía hasta ese momento. Era bastanta pálido, casi tanto como yo, lo que hacía que destacasen dos...

Las cinco amigas (24)

A la mañana siguiente inicié mi rutina como cualquier otro día. Apenas había pensado en los enormes aros que tenía en las orejas hasta que llegué al baño. Se habían enredado en mi pelo y me costó un buen rato liberar mis mechones sin arrancármelo. Mis labios y cejas fruncidos hablaban de la frustración que sentía.

***Vigésimocuarta parte*****

A la mañana siguiente inicié mi rutina como cualquier otro día. Apenas había pensado en los enormes aros que tenía en las orejas hasta que llegué al baño. Se habían enredado en mi pelo y me costó un buen rato liberar mis mechones sin arrancármelo. Mis labios y cejas fruncidos hablaban de la frustración que sentía.

Casi inmediatamente volvió a mi mente la película de la noche anterior. La chica... o transexual, o lo que fuera, era guapa e induda...

La novia tenia testiculos! 2

Dia a dia disfruta como una inocente novia las delicias de ser mujer...

LA NOVIA TENIA TESTICULOS ¡¡¡¡¡¡¡ 2

Tras anunciarme mama que en cuatro dias me casaba una brutal palpitación se adueño de mi pene que como por un morboso y malsano resorte golpeaba incansablemente mi ombligo, dejando pegajosos goterones de dulce pre-cum…..y yo lloraba de felicidad ¡¡¡

Mama se encargo de todo, busco cuatro damas de honor, por supuesto dulces mariconas que se vestirian de raso color turquesa y sombrerito a juego,guantes y medias de seda rosa y un lindo ramo de gladiolos cada...

Las cinco amigas (23)

A pesar del ejercicio físico, el día había sido poco exigente, por lo que no tenía demasiado sueño. Al final, para vaciar la mente hice lo que tantas personas: conectar la tele una vez más. No era demasiado tarde, quizá no más de las diez, por lo que me sorprendió lo que ví.

***Vigésimotercera parte*****

Desde que volví a mi habitación, no paré de darle vueltas a la cabeza. ¿Había ofendido en algo a Dalia? También podía ocurrir, simplemente, que no se encontrase del mejor humor del mundo por cualquier motivo. Quizá simplemente estaba cansada... El encuentro había sido demasiado breve.

Después de la frugal cena, me desmaquillé con la ya habitual sensación de hambre en el estómago. Los gigantescos aros eran un incordio para cada actividad que ll...

La cadena

Lucia Carolina cuenta una leyenda de un chico que guarda muy en sus adentros sentimientos transexuales y deseos de que sentirse mujer, logra que su padrastro le de todo ello. Lo extraño es que puede atribuir esto a una cadena que recibió por internet.

La cadena

Patricio un Joven de confección delgada que a pesar de sus 18 años no pierde su tierno y angelical rostro; como es su costumbre, en la mayoría de las tardes se dirige al cibercafé que esta cerca de su casa; con movimientos muy masculinos y todo seriedad pasa por una construcción donde abundan los albañiles, algunos sin camisa y no puede evitar excitarse al ver cuerpos tan viriles, hombres recios  y fornidos, le es muy difícil no desviar su mirada paro aun así sigue caminando, ve pasar...

Por querer experimentar un embarazo (4)

¿Qué buscaba Santiago? ¿Por qué estaba tan interesado en mi metamorfosis? ¿Por qué estaba contribuyendo tanto a cambiarme de sexo? ¿Debía acompañarlo?

Luego, el segundo paso. Y el tercero.

No supe cómo, pero todos mis movimientos se habían acompasado a la música de Thalía. Incluso, el golpe de mis altísimos tacones parecía marcar el ritmo con el vigor de un metrónomo.

"Róbalo, amárralo, pégale, goza su dolor, muérdelo, lastímalo, castígalo, comparte su pasión. agárralo, desgárralo, azótalo, sufre el corazón, cálmate, tócalo, mímalo, una canción de amor".

En mi avance hacia el centro de la explanada, detecté un silencio absoluto. Sí...

Las cinco amigas (22)

Mi corazón se aceleró una vez más. A este paso estaba gastando todos los latidos que tenía destinados a mi vida entera. ¿Habían limitado mi inteligencia? Estaba claro que lo podían hacer. A duras penas recordaba ya nada de cuando era varón y mis cambios de comportamiento eran más que obvios hasta para mí.

***Vigésimosegunda parte*****

Después de volverme a maquillar, el tiempo muerto que me habían dejado lo empleé en la televisión. Seguía echando mucho de menos tener algo para leer. Decidí que, en cuanto tuviera la oportunidad, le pediría a Isabel un libro. Cualquiera. A poder ser, una novela. Y si no, por lo menos una revista.

Dado que mirar por la ventana agota pronto sus posibilidades, no tenía más entretenimiento que la caja tonta. Y a ella me dediqué. Pasé rápido por la...

Las cinco amigas (21)

Creía saber la razón por la que Natalia se había entristecido tanto al saber que no iba a sufrir más modificaciones. Podía estar equivocada, naturalmente. Quizá aún tenía la esperanza de que la volvieran a convertir en su yo masculino, aunque ella sabía, igual que yo, que las modificaciones eran permanentes e irreversibles.

***Vigésimoprimera parte*****

Creía saber la razón por la que Natalia se había entristecido tanto al saber que no iba a sufrir más modificaciones. Podía estar equivocada, naturalmente. Quizá aún tenía la esperanza de que la volvieran a convertir en su "yo" masculino, aunque ella sabía, igual que yo, que las modificaciones eran permanentes e irreversibles.

Para confirmar mis sospechas tenía que hablar de algo que las tres habíamos esquivado hasta entonces: de nuestra sexual...

De todos

Una pillada en casa de los vecinos puede acabar mal... o muy bién.

De todos

Esteban, mi vecino y compañero de clase, iba ya por su tercera novia con sólo 18 años. Bastante normal, teniendo en cuenta que es un bombón, tiene casa con piscina, es simpatiquísimo… vaya, un partidazo. El caso es que él sigue prefiriendo mi culo desde que, hará un año ya, me salvó de una paliza que iban a darme unos idiotas de nuestra clase. Ese día lo atrapé con mi carita de víctima salvada por los pelos, mi cuerpecito de metro sesenta depilado, mi vocecita sensual y, sobre todo, mi...

Las cinco amigas (20)

El tiempo que pasé esperándola sirvió para que mi mente diera muchas, muchas vueltas. Pensaba en mí, pero también en Isabel, en la pobre Isabel. Y en mis amigas, Dalia y Natalia. ¿Serían ellas conscientes también del oscuro peligro que las acechaba? ¿Hasta dónde iban a llegar con nosotras?

***Vigésima parte*****

El tiempo que pasé esperándola sirvió para que mi mente diera muchas, muchas vueltas. Pensaba en mí, pero también en Isabel, en la pobre Isabel. Y en mis amigas, Dalia y Natalia. ¿Serían ellas conscientes también del oscuro peligro que las acechaba? ¿Hasta dónde iban a llegar con nosotras?

Miré mis manos, pequeñas, con sus uñas perfectamente blancas. Tan diferentes a cuando pertenecían a un hombre. Mi reducida estatura. Mi abundante pelo, ahora rizad...