Cincuenta contra veinte parte 2

Michelle tiene su primer encuentro con Roberto el cual es mucho mas intenso de lo que habia planeado, decidira que es lo que realmente queria?

El celular de Michelle suena con una melodia famosa de una pelicula de Disney, Michelle estaba en su cama con las piernas entreabiertas y flexionadas sobre la  cobija, una mano apretando su pecho derecho y la otra acariciando con firmeza su vulva, el sonido obligo a MIchelle a abrir los ojos, estaba en medio de un gemido sordo cuando se vio interrumpida, con la mano derecha, aun mojada por sus jugos vaginales se estiro por el celular, era  un mensaje de Roberto, indicandole que estaba en la esquina de su ca...

Nuestra primera vez en muchas cosas

Sexo con Maduro-Dominación-Infidelidad compartida. Un cumulo de cosas vividas en nuestra primera vez

Deseaba verla con otro hombre.

Siempre lo tenía metido en la cabeza, me la follaba y pensaba que era otro el que se la estaba metiendo.

Así empezó mi obsesión por verla follar con terceros, cada día me ponía más y más.

Me llamo Julio tengo en la actualidad 40 años, soy un tipo deportista, 180 musculado, me cuido mucho, no soy feo y mi polla es de lo más normal creo que en la media.

Mi mujer Mirian, deportista profesional competidora, un cuerpo de infarto, pelo liso morena-castaña (al...

Cincuenta contra veinte

Michelle tiene 22 años y siempre ha sido insegura y callada, un dia su aburrida vida cambiara por un descuido y un favor de un hombre 30 años mayor que ella

Michelle 22 años/ 167 cm de altura/ 60Kg de peso

Cabello castaño oscuro, siempre lacio y corto recogido en una coleta y un fleco que tapa su frente, ella era muy aaseada por lo que al acercarse siempre podia apreciarse una rica fragancia frutal emenanando probablemente de su cabello recogido rigidamente, con un sujetador discreto, le daba una apariencia profesional y seria, como de secretaria de esas que no llaman la atencion y parace que son una misma con su ordenador, aunque en ella por alguna razon...

El abuelo trae vaselina.¿que querrá?

Bajo agachándose lentamente hasta mis pechos y devoro mis pezones sabiamente hasta hacerme gemir como una loba, mientras su mano jugaba con mis trastienda lubrificando bien con la vaselina.

Suena el timbre abro la puerta y allí delante ante mí, nuevamente mi abuelo cañón con un bote vaselina en una mano y un ramo de flores en la otra.

Sonríe y me dice, pon las flores en agua y ponte fresca y cómoda que te voy a poner un poquito de esta crema por la puerta trasera que hoy la vamos a estrenar y veras  vas a gozar como por delante.

Le dije, que decidido viene esta mañana y que cachondo, mientras le eche mano al paquete y estruje fuerte aquel pollon semidormido que tanto anhelaba.

...

El poder de la lujuria

Tu mirada recorre mi cuerpo, y en tu cabeza siempre se forma la misma imagen de sorpresa. (“¿Cómo es posible que un cuerpecito como el mío soporte al tuyo?”)

Cuando intentas abrir tus ojos, percibes que ha pasado mucho tiempo, pues puedes ver un pequeño resplandor en la ventana que indica que se ha hecho de día. Haces amago de levantarte, pero estas tan a gustito a mi lado, que desistes, y te acoplas de nuevo a mi cuerpo y cierras tus ojos de nuevo, esperando a que me despierte.

Me estiro un poco, saliendo sin muchas ganas de mi letargo. Siento la calidez de tu cuerpo rodeándome, como una armadura, tu brazo por encima de mi tripa reposando con calma. Boste...

Adicta a primera polla negra (penúltima parte)

Penúltima parte de mi primera experiencia con un viejo afrocolombiano inducida por mi marido que durante años me ha convertido en una puta de viejos cochinos. Al fin me comí una polla soñada, enorme, negra, larga y gruesa. Después de entregarme a Don Aurelio mi vida ya no fue la misma.

Yo no podía más, me hinqué y le bajé el pantalón muy de prisa... su verga era descomunal, larga y muy gruesa, de un negro brillante, la más gigante y sabrosa que he probado en toda mi vida de puta, destacaba su prominente cabeza y sus marcadas venas, su olor intenso casi me hace acabar.  De verdad nunca había chupado con tanta pasión un pico -y vaya que he chupado- don Aurelio me decía "que mamas rico mamacita, se ve que tienes experienci puta"... "mama la verga puta", "cómeta toda".

Yo hacía esfuerzo...

Adicta a mi primera polla negra (continuación)

Esta es la segunda parte sobre mi primera experiencia devorando una enorme verga afro... fue intensamente excitante, nunca había estado tan caliente y hasta ese momento nunca había gozado tanto. Me corrí una y otra vez, gemí y lloré por todo el inmenso placer que me provocó mi primer macho negro...

Don Aurelio tocó el timbre, le abrí, no dije nada, no era necesario, lo tomé de las manos, dejó las bolsas y me tomó de las caderas y empezamos a besarnos como si fueramos novios que no se han tocado en semanas.

Con una mamo le acariciaba su peludo pecho y con la otra frotaba su enorme verga. El apretaba mis tetas y mi culo... con fuerza, mostrando su deseo salvaje, su lengua aspera me enloquecía al jugar con la mía, me manoseaba muy muy rico mientras me decía cochinadas que elevaban mi calentura a mi...

Doble dosis de nata y calcio del abuelo

Lamí, comí, absorbí, sobe, deguste, paladee aquel cabezón jugoso mientras una de mis manos testaba los enormes y peludos huevos que andaban calientes como sacados de una incubadora.

Estaba tomando café al día siguiente de mi encuentro con el padre de Gema, mi amiga, con aun en la retina el miembro de ese abuelo que me había dejado medio escocida, solo pensar me hacía sentirme mojada y algo en mi interior se estremecía, cuando sonó el portero y una voz inconfundible y varonil delato como sacado de mi cerebro la presencia en el portal de aquel semental de la tercera edad.

Me dijo, buenos días tesoro, no he parado de pensar esta noche en el encuentro y he decidido venir a compensart...

Adicta a la polla descomunal de un viejo afro

Mi marido me hizo puta de viejos asquerosos. Instaló en mi la calentura por hombres mayores y feos. Cada vez que estoy cerca de un viejo no puedo evitar calentarme y ofrecerme, algunos terminan sobre mi y otros sólo se atreven a manosearme. Hoy les voy a contar cuando me comí la primera verga negra.

Como ya les he contado en mis otros relatos, mi marido despertó en mi a la perra que llevaba dentro, primero me hizo abrirle las piernas a la pareja de mi mamá, enseguida al viejo chofer de mi empresa y continúo con el deprabado jardinero del barrio: Siempre eran los peores viejos, salvo una obligada entrega a mi joven cuñado.  Todas esas consentidas infidelidades me otorgaron un intenso placer que yo desconocía.  Yo retribuía a mi marido relatándole con lujo de detalles cada sesión, eso le bastaba para eya...

Sexo en club deportivo

Ya con su pija dentro de mi boca, mi lengua acarició su tronco, su miembro se puso bien duro en mi boca, y me lo tragué todo. Sus 12 cm de carne.

En cierta época tenía el hábito después de cenar y que mis padres se fueran a dormir, de chatear.

Lo hacía por varias horas, hasta las 3 o 4 de la madrugada.

En uno de esos chats, que siempre terminaban en temas sexuales, conocí a Federico.

El tenía 38 años en ese momento, muchos mas que yo.

Pegamos onda porque yo jugaba al Hockey sobre césped y el tenía una sobrina que también jugaba y solía llevarla a algunos partidos.

En uno de los chats lo invité a que me venga a ver en un...