La madura confinada 2

La continuación de mi anterior relato contando las historias de una madurita con la que pasé el confinamiento del año pasado.

Lo primero de todo. Muchas gracias por la valoración y los mensajes tras la publicación del anterior relato. Y mis más sinceras disculpas por la tardanza en publicar la segunda parte.

Al día siguiente de haberlo hecho con mí madura huésped, al contrario de lo que me esperaba. La situación fue de frialdad y distancia por su parte. Si bien es cierto que yo me esperaba cierto arrepentimiento por su parte, esta pasó de nuevo a encerrarse en su habitación y reducir el trato conmigo a lo más indispensable. ...

19 de Marzo… y viaje a Madrid

En España el 19 de marzo es festivo en algunos sitios, se festeja… día del padre, santo de los José… y en Valencia se celebran las fallas si no fuera por lo del COVID-19.

Desde el último encuentro con Olga y Genoveva, no había tenido nada más con ninguna mujer. Quise dejar pasar unos días o mejor dicho que pasara el día 19 de marzo, que como he contado en la introducción, aquí en España en algunos lugares es festivo, como en Valencia, también se celebra el día del padre y la onomástica de los que se llaman José, María José o Josefa y si no estuviéramos con el COVID-19 aquí se celebrarían las Fallas, para quien es de aquí unas fechas muy importantes. Pues para este día, que p...

Hotel

Una de las encargadas de las limpieza de las habitaciones de un hotel se encuentra una bonita sorpresa en una de ellas. Un buen rato de morbo y pasión con un joven agradable, morboso y bien dotado.

Trabajo en un hotel, arreglando las habitaciones haciendo las camas y limpiando. No es un gran trabajo pero me sirve y no es que de grandes oportunidades para ascender, ni para nada mas. Aunque alguna vez si que depara sorpresas. En ocasiones he encontrado alguna cosa de valor olvidada por algún cliente que se había marchado. Si no se reclama, ya sabéis Queen se la queda.

O como esta mañana cuando al abrir la última puerta que me tocaba hacer. Ya estaba sola en la planta cuando me encuentro al huésped...

Como alma en pena (ll)

Hay deseos que van más allá de la muerte.

SE RECOMIENDA LA LECTURA PREVIA DEL PRIMER EPISODIO.

En los días que siguieron no paré de darle vueltas a lo ocurrido. Si mi intuición resultaba ser acertada, la misteriosa mujer volvería a aparecerse la siguiente noche sin luna, justo veintiocho días después. Eso coincidiría con la referencia del difunto alguacil a la luna nueva. Lo que sumado al número 83.137, hacía suponer que éste también había conocido a la mujer fantasma.

Estaba claro que aquel asunto del número ocultaba un misterio que el...

Historias del abuelo calentón (34)

La señora Judit con sus dos buenos melones y su figura provocativa era digna de ser profanada, y mi mente solo pensaba en someterla a mis travesuras impúdicas e inmorales.

HISTORIAS DEL ABUELO CALENTÓN (34)

Aquella mañana me levanté como tal cosa, y así era como se comportaban las féminas de aquella familia, de una manera espontánea y despreocupada; y de igual modo que pasó con Dayana, Paola no me hizo ni una insinuación a lo sucedido la noche anterior.

En los días transcurridos en aquella mansión me había ido de maravilla, sin comerlo ni beberlo, me había cepillado a dos leonas que me habían suministrado un placer inconmensurable, y los sucesos habían ocurrido si...

Continua la seducción… con sorpresa.

Genoveva ¿Se arrepiente? ¿No se arrepiente? del primer encuentro, de su primera infidelidad.

Después de ese primer encuentro con Genoveva no nos podríamos ver, porque me tocaba hacer un viaje de trabajo. El viaje sería largo pero en un día se terminó porque se suspendieron todas las reuniones menos una. Al regresar a Valencia iba a mandar un whatsapp a Genoveva pero a última hora no lo hice por no comprometerla. Si quería que hablásemos ya me mandaría uno o me llamaría, mientras me dejaría “querer” por Olga mi vecina de 19 años que con frecuencia se hace la encontradiza conmigo. Como ya la describí...

Una suegra caliente

Suegra caliente

‘’ La aventura podrá ser loca pero el aventurero para llevarla a cabo, ha de estar cuerdo.’’

Chesterton, Gilbert  1874 - 1936 Novelista inglés

El próximo sábado estáis invitados a una pella en Peñíscola - les dijo doña Esperanza a su hija y yerno - salud que no tengáis ningún compromiso - siguió ella - por si no lo recordáis cumpliré 57 años. ¡Ah! Y acepto todos los regalos que queráis hacerme. Al atardecer podemos ir a un baile con orquesta que hacen en una terraza de bar.

A doña Esperanz...

Un yerno egipcio

Yerno egipcio

UN YERNO EGIPCIO

‘’ Un diplomático es aquel hombre que siempre se acuerda del cumpleaños de su mujer, pero nunca de su edad’’. Frost, Robert (1874-1963) Poeta estadounidense.

Doña Carolina hacía ya muchísimos años que no iba a la playa, ya que no recordaba ni cuando fue la última vez. Desde que enviudó, su tiempo lo pasaba entre las lecturas de historia que a ella le encantaban y las películas, que podían ver en el canal satélite, aunque fuesen en idiomas que no entendía. Si de cuando en cua...

Sólo en el apartamento con una madura

Madura comprensiva instruye a joven curioso

Falta poco para Semana Santa y mis padres me han encargado que me desplace hasta la localidad costera donde pasamos las vacaciones. Tenemos un apartamento al que hace meses que no vamos y que hay que preparar para que el día de llegada no nos tengamos que pasar varias horas ventilándolo, destapando los muebles y haciendo correr el agua por los desagües para eliminar los malos olores.

Este año por primera vez me ha tocado a mí hacerlo ya que mis hermanos mayores me han pasado el testigo para hacerme ca...

Descubriendo el sexo con Marta y su tía Elena 2

En esta segunda parte, entra en juego otra variante. Lo vais a disfrutar con la lectura de este relato. Mejor leer antes la primera parte, para saber que ha pasado.

Estoy aqui, para seguir contando mi experiencia, con Marta y su Tía Elena.

Para los que no habéis leído mi primer relato, deberíais, ya que si no, es posible que no entendais nada.

Esa misma noche, mientras cenábamos, Elena, no paraba de lanzarme besos y me miraba con cara de vicio, mordiéndose el labio inferior. Su marido no se enteraba de nada. Pero Marta, se reía y poniédose dos dedos en forma de V, delante de su boca, sacaba la lengua y hacía un gesto, como si comiera un coño.

Terminam...