El polvo canalla
En aquel momento, a él no le apetecía follarla con ternura. Quería follar para darse placer sin pensar en ella. A ella le encantó.
EL POLVO CANALLA
Pelayo, por fin pudo ir a Madrid, donde ella vivía. Por fin podrían tener la ocasión de verse.
Hacía varios meses que su relación de fantasía, había sufrido altibajos. Mantener relaciones en las redes sociales y sin compromisos mutuos, siempre es difícil. Pero al menos cenarían juntos y podrían hablar y explicarse.
Cuando ella llegó, él la esperaba en la puerta del hotel, en el barrio de Salamanca. Ambos tenían la duda de qué hacer si subir a la habitación o ir directament...