Duramente (5)

- Exacto y aquí tengo un buen rabo, que ahora mismo te voy a dar, así que túmbate bocarriba y saca la cabeza fuera de la cama, te vas a tragar mi poya entera - dijo duramente - ah! y abre bien la boca.

Se levantó a llevar el platito a la cocina, dejándome acurrucada en la cama, no tardó mucho en volver, acercándose a mí y regalándome una caricia me dijo: - Te has portado muy bien en el castigo y lo has aguantado hasta que lo has aceptado, pero no por eso vas a obtener un premio, sigues siendo una comepoyas y a las comepoyas como tú que se les da? - A las comepoyas como yo se les da de comer una buena poya Señor - Exacto y aquí tengo un buen rabo, que ahora mismo te voy a dar, así que túmbate bocar...

Crónicas de Nihilistán (11)

Khutsy, la hermana menor de Raddith, sueña con tener su propio esclavo. Pero, evidentemente, aún carece de la madurez y responsabilidad que ello exige. El esclavo Manchudo lo sufrirá en carne propia.

Crónicas de Nihilistán (XI)

  1. Khutsy se divierte

Tal vez lo narrado hasta aquí, pueda llevar al lector a pensar que los nihilistanos son naturalmente crueles y sádicos. Nada más alejado de la realidad.

En Nihilistán los esclavos son sólo objetos, dispuestos para comodidad de los amos. Valerse de ellos para todo tipo de servicios, incluso para divertirse, es un derecho natural de los amos, perfectamente normal en la cultura nihilistana.

Por lo general, los nobles nilistanos no...

Jeni y Rosa (8)

Marta se ensaña un poco.

La perrita se puso sobre los muslazos robustos de su ama, y empezó la cuenta de su castigo: "uno, dos, tres…" cada vez su voz estaba más tocada y, cuando la zapatilla rosa de Eva llegaba a la docenita de golpes, ocurrió algo terrible: Rosa se orinó. No se meó sobre el suelo, sino sobre el muslo poderoso del ama

Cuando Marta sintió resbalar sobre su muslo la orina de la perrita dio un bote en el asiento que resulto cómico; para Rosa no, para empezar porque cayó al suelo de golpe y se hizo daño, p...

De profesor a perro (3)

¡por favor no me hagas por esto!, ¿que no te da con todo lo que mas hecho?

DE PROFESOR A PERRO 3

Luis dejó a un lado sus recuerdos y pensamientos al sentir un golpe en la cabeza, Rubí estaba sentada en el comedor y se disponía a desayunar observando burlona al profesor que estaba distraído lo golpeó con la palma de su mano en la cabeza diciéndole: ¡reacciona idiota!, Rubí disfrutaba de su desayuno tostadas, fruta picada y jugo de naranja, mientras que Luis la contemplaba en silencio y babeaba por el olor de los alimentos al terminar de desayunar Rubí reunió en u...

Mis pensamientos morbosos

Pensamientos que deseo hacer realidad.

Mis pensamientos morbosos

Me gustan todas, me gustan todas, como dice la canción, pero mi mayor morbo es ser humillado, bien humillado por una mujer, una que descubra mi parte femenina, la mas morbosa de todas, que finalmente me humille de palabras, de hecho, que me haga sentir inferior, y que disfrute esa situación.

Que me deje primero descubrirla y disfrutarla como hombre, permitiéndome llegar a su peor puta , cogerla y usarla a mi placer, despertar sus fantasías , hacerla sentir bien...

Vida animal (3)

Primer dia de la nueva vida de la esclava vendida a un repartidor. Anecdotas y suplicios de una esclava tirando un carro.

El corsé es de nuevo ajustado hasta casi no dejarla respirar. Las tetas parecen entonces intentar escapar. Se agrandan y levantan espectacularmente. Mientras su culo, subido en aquellos grandes tacones, aumenta de volumen y deja ver unos turgentes y apretados gluteos. El carro es enganchado al corsé.

Tiene la sensación que pesa menos que la tarde anterior. Cuando su amo sube al carro se da cuenta que sus apreciaciones de antemano son erróneas.

Esta expectante porque es consciente que ha de...

Playa

Una mujer casada y sola en una playa,me seduce. Su actitud caliente y su indumentaria despiertan mi instinto. Lograré dominarla? Podré pervertirla?

Hacía un calor sofocante en la playa. Debajo de la sombrilla atisbaba buscando alguna presa sobre la que caer. Una familia se marcha y aparece ella. Tumbada sobre la toalla, un bikini blanco de punto. La piel morena, muy morena. Las piernas dobladas, abriéndolas, cerrándolas, con lentitud.

No quería acercarme a ella y sentarme a su lado, no es elegante, aunque lo deseaba. Me quedé esperando la ocasión. Se levantó para refrescarse. Era mi ocasión. Me quedé unos instantes mirando sus andares. Eran...

Jeni y Rosa (7)

Marta sigue mandando, y cada vez más

La comida transcurrió tranquilamente. Yo comí y bebí muy a gusto, aunque me encontraba mal; estaba contento de tener a Marta a mi lado, me sentía protegido. Jeni no parecía particularmente tensa; solo lo pasaba mal la perrita que tenía dificultades para comer, con las manos atadas a la espalda, teniendo que coger la comida del suelo con los labios y los dientes, bebiendo de un plato con la lengua como los perros; además, debía de haberse percatado de su situación, se la veía bastante asustada y, encim...

Duramente (4)

- No - dijo duramente - si te dejo pasar este atrevimiento, habrá una siguiente vez y tienes que aprender que no puedes hacer lo que te venga en gana, tengo que castigarte.

Cuando notó mi cuerpo tensionarse, señal inequívoca del orgasmo que estaba a punto de sobrevenirme, paró repentinamente su mano, manteniendo un dedo presionando mi clítoris, haciendo que mi orgasmo se disipase, empecé a mover mis caderas, de arriba a abajo, intentando frotarme con su dedo, me sentía frustrada y muy caliente, nunca había sentido tal necesidad de correrme, pero estaba claro que no me iba a dejar, me iba a hacer sufrir. Cuando notó mi movimiento apartó la mano y me dio un azote con la ma...

Crónicas de Nihilistán (10)

Durante el cumpleaños de la señorita Raddith, las mujeres de la familia se reúnen para intercambiar valiosos consejos sobre el manejo de los esclavos.

Crónicas de Nihilistán (X)

  1. Cosas de mujeres

Es sabido que las mujeres son más detallistas que los hombres. Y más propensas abordar temas íntimos, y confiarse algunos secretillos.

El tema de los esclavos no es la excepción.

Los hombres, en su mayoría, suelen conformarse con que su esclavo los sirva y obedezca, sin fijarse en mayores detalles.

Para las mujeres, en cambio, se trata de un tema muy delicado, en el que los pequeños secretos y los valiosos consejos se multiplic...