Morbo en una disco

Mabel envia una carta a Carlos donde le relata parte de una de sus fantasias. Si bien parte de ella ya es realidad, la idea de conocer a alguien allí para tener un trio, la seduce y la impulsa a relatarsela a su amante...

Amor:

Si me acaricias, si me susurras cosas al oído, me haces perder la cabeza y si me lo pides con descaro, te complacería mucho más; ser obediente a ti, hacer todo lo que me pides y lo que me insinúas al hablar, me dejas rendida a tus pies y con ganas de complacerte hasta hacerte explotar.

El saber que te masturbas y te excitas viendo en mis fotos, mis senos, mis nalgas, mis piernas, mi vagina, mi culo y mi boca,  fotos que me tome para ti, para excitarte al mirar en la pantalla mi cuerpo...

Mi venta (09: Usada en casa del Amo por mi nuera)

Nunca hubiera concebido que mi hijo mayor,Joan, consintiese que mi nuera Montse anduviese en tales aventuras sexuales. ¿Quizá transmití a mis hijos mi masoquista naturaleza? ¿Quizá el ambiente social en que me muevo es así? Ya les contaré.

Lo siguiente que pude ver me asombró:

El/la esclava Van apareció nuevamente con una cámara digital. Mientras la divina Gloria animaba con sus manos y boca las pollas de los dos Señores invitados, Alba comenzó a trabajar con su boca el coño de mi nuera que se acariciaba y amasaba las tetas henchidas por el preñado. Cuando llegaba al orgasmo lo aviso:

  • ¡Ya llego! Daniel, ¡Ya llego!

En ese momento Alba dejó de comerle el coño y el Amo le arreó a Dama Montse un sonoro y despiadado golpe...

Vergüenza y humillación

Una azotaina más que me dió mi madre, esta vez con la ayuda de mi abuela.

VERGÜENZA Y HUMILLACIÓN

Como os he contado ya, mi abuela tampoco era manca a la hora de sacudirme con la zapatilla, aprobando y secundando los métodos educativos y correctivos de mi madre. En breve os narraré alguna de las azotainas que me dio la madre de mi madre (de tal palo tal astilla), pero ahora os quiero contar de una en la que participó indirectamente.

Viví mi infancia y adolescencia en un barrio obrero, en un bloque de pisos con una particularidad, tenía un gran patio central,...

Reflejo

Vuelvo a subir este relato, que por circunstancias desconocidas bajaron de la web. Espero que ahora sí se respete.

Reflejo

A Laura

Antes

Cuando Rogelio fue mi amante yo tenía dos años de casada y muchas dudas sobre mi matrimonio. Apenas rebasaba los veinte años, mi marido me lleva doce, y me aterraba pensar que tan temprano habían terminado mis tiempos de coquetear. Por eso acepté las galanterías de Rogelio. Tenía aires de poeta exaltado que en todas las mujeres busca su gran amor. Creyó encontrarlo en mí. Aunque me engaño. Creyó encontrarlo en mis piernas. En ese entonces usaba faldas moderadame...

Esclavo de una mujer cristiana

Secuela de Esclavas en un mercado de oriente. Ahora el esclavo es un joven musulmán cazado por los cristianos.

En la oscuridad escucho los chillidos de agonía. Estoy desnudo y he sido depilado por unas monjas que ocultaban su cuerpo entre enormes telas y que hablaban entre susurros, como los demonios. Lo único que ha quedado de pelo en mi cuerpo es mi melena rizada, negra como el azabache: mi polla aparece completamente descubierta y puedo notar la piel de mi pubis lijosa, erizada, igual que la de mis axilas.

No puedo cubrirme: tengo las manos encadenadas a la espalda. Mis pasos son cortos: los pies tamb...

Para mi perra

Un dia, AMO y perra.

Este relato ha sido escrito por mi amo. Él me lo dedicó, y por fin me ha permitido publicarlo.

Acabo de llegar del trabajo, abro la puerta de casa y te encuentro en la cocina con las bragas puestas perra "como te atreves cerda, sabes q tienes prohibido andar vestida en mi presencia", sabes que vas a ser castigada y dominada severamente.

"Amo perdóneme ha sido un descuido, no me castigue" me dices, "lo siento puta me has

desobedecido y tengo q hacerlo".

Me acerco a ti, te arranco...

Crónicas de Nihilistán (6)

Como todos los esclavos, Manchudo debe también servir en la casa de su capataz, como sirviente doméstico. Allí todos abusan de él, según sus necesidades.

Crónicas de Nihilistán (VI)

  1. Servicio doméstico

En Nihilistán, cada capataz está a cargo de varios esclavos, según la importancia del capataz y el tipo de tarea que tenga asignada. Un capataz promedio maneja tres o cuatro esclavos. Uno de buen rango, hasta diez.

Una de las prerrogativas del capataz ha sido siempre disponer de los esclavos a su cargo para su servicio personal y el de su familia. Las casas que ocupan los capataces y sus familias se hallan dentro de los dominios del pr...

La Trampa (3: Angela)

Pablo càsi escapa de las garras de sus propias filias, pero ahora està a punto de vivir sus mas profundas fantasìas y su peor pesadilla.

La Trampa (3: Ángela)

Continuación de La Trampa parte 2 http://www.todorelatos.com/relato/58779/

Pablo respiró aliviado de que Mara no hiciera ninguna mención de haber hablado con Mario, pero el temor de una indiscreción se alojó en algún lugar oscuro de su mente desde donde, como un demonio, lo atormentaba cuando Mara no estaba con él y no lo dejó descansar a partir de ese momento.*

Pero lejos de esos momentáneos remansos de paz en que disfrutaba de la compañía de su novia, esta...

Quiero que seas mi perra... TU ELIGES

Lo mas importante en este tipo de relación es que las dos personas estén de acuerdo hasta donde se puede llegar y cuales son los limites, yo propongo y TU ELIGES.

Te haré desnudar, te mandare poner a cuatro patas mientras simplemente te observo y veo las sensaciones que en ti provocan, TU ELIGES.

Te comprare un bonito collar con su correspondiente cadena para poder pasearte y que aprendas a seguir el ritmo que yo te marco, TU ELIGES.

Cuando este descansando, viendo la tele, leyendo etc. tendrás que estar a mis pies por si te necesito en algún momento, TU ELIGES.

Será tu deber y una de tus grandes satisfacciones lamer como buena perrita cada cent...

Marian: una zorra oculta (2)

Me levante y me puse frente a Marian. Cogí su pelo para levantarle la cabeza, y le metí la polla en la boca. Entonces, le hice una señal a Katy que empezó de nuevo a comerle el culo y fallársela con los dedos, con más fuerza todavía.

Marian: una zorra oculta II

Como os dije al final del relato anterior, después de follarme por el culo a Marian en el asiento trasero, salimos los dos del coche en dirección al pub que yo había elegido. Lógicamente, dado mi estado civil, el local no se encontraba dentro de aquellos en los podría reconocerme alguien ni por lo más remoto. De hecho, el garito en sí, era… digamos que marginal.

A pesar de lo que ya había ocurrido esa noche, que no era poco, yo casi no podía creerme aún que aquel...