Lucía (2)

Lucía empieza a adentrarse en el mundo que Lucas empieza a mostrarle.

Día 2. Antes de ir a trabajar.

A la mañana siguiente, mientras Lucas se duchaba, su teléfono móvil parpadeó con un sms. Era de Lucía, diciéndole que se iba a retrasar, que si quería llegara más tarde a por ella o que luego se iba ella por su cuenta. Lucas la confirmó con otro mensaje que la esperaba y que la llamaba cuando estuviera cerca.

Tras tomarse un café, salió a por su coche y al subirse y mirar el asiento donde estuvo ayer su nueva posesión, una sonrisa se dibujó en su cara.

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Diario de una puta esclava (2)

Enséñanos bien el coño. Vale, ábrelo bien, así. A ver el culo, date la vuelta. Separa el culo con las manos.

10-5-1994

Son las 4.30 de la madrugada y mi amo acaba de dejarme en casa. La verdad es que no voy a ser capaz de dormir después de todo lo que ha pasado hoy.

Todavía no eran las 10 cuando llego esta mañana. Traía una pequeña bolsa en la mano. Le prepare el desayuno, y después de mirarme detenidamente mientras se tomaba el café, saco de su bolsillo las llaves y me soltó las cadenas.

-Coge lo que hay en esa bolsa, vete al baño y prepárate. Vamos a salir.

En la bolsa venia un pint...

De profesor a perro (4)

¡ni se te ocurra llorar como una nenita!, te lo advierto si lloras te juro que te doy de patadas hasta que me canse.

DE PROFESOR A PERRO 4

Sin demorarse tanto Luis se postraba de nuevo ante Rubí, ésta le ofreció un pie y Luis se dispuso a quitarle el zapato sujetando el tacón con sus dientes y jalándolo consiguió quitarlo, respiro profundo y con mucha pena sujetó con los dientes la punta del calcetín blanco y también lo quito sintiéndose embriagado por un ya clásico olor al que cada vez mas se iba acostumbrando, un olor a cuero y sudor; hizo lo mismo con el otro pie. En verdad Rubí tenia los pies sudados pues...

Vida animal (5)

Cuando entraron Justino y Javier, tampoco se sorprendió. Les gustaba hacerlo juntos. Era fácil y sin complicaciones, uno por el culo y otro por el coño. . Terminaba sonriendo cuando se corría y veía los ojos en blanco y los espasmos de impotencia de la esclava. Savia perfectamente que ella no podía correrse.

VIDA ANIMAL 5

Aquella noche, como casi todas las noches, una vez terminado su trabajo, se ocupo de satisfacer a los empleados del patrón. No siempre acudían todos, y en concreto en ese momento, 5 hombrees esperaban sentados tranquilamente a las puertas de la fabrica. El patrón entro, amarro su animal en el establo, le quito el bozal, y le hecho de comer. A continuación se dirigió al interior de su fabrica, donde comprobó meticulosamente que sus empleados cumplían el pacto que habían hecho 7 mese...

Regalo de cumpleaños

Un joven es sometido a una prueba para certificar el control de calidad de su sumisión...

El Volvo gris metalizado se detuvo frente a un hombre inmóvil.  La ventanilla eléctrica bajó un poco y la conductora pregunto:

-¿David?

El joven asintió con la cabeza y ella dijo sonriendo:

-Suba al coche.

David subió inmediatamente murmurando un tímido "buenos días".  La mujer sonrió de nuevo y le preguntó:

-¿Trajiste los papeles?

Era el signo convenido.  David le mostró su carné de identidad, ella lo miró, sonrió satisfecha y cogió su teléfono móvil.

-Perfecto,...

Sueños

Sueños de una perra que no se decide a ser.

SUEÑO 1.

Estas vestida sola en una habitaciòn de repente se abre la puerta y entro, tù te quedas ahi quieta sin decir nada asì que sin tiempo de màs ordeno:

-De pie y en posicion

Tù me miras y al ver mis ojos bajas la mirada, solo atinas a estar de pie y con las manos entrelazadas.

-desnudate

levantas la mirada y mueves negativamente la cabeza.

-ordene desnudate, no repito

No sè si el tono de voz o la actitud que tomo es lo que provoca el cambio en ti, pero proc...

Lucía

Cuando la amistad de dos amigos pasa a un estado de intimidad mayor, nunca se sabe donde está el límite.

Capítulo 1. L&L Día 1

No era más que un día cualquiera de un verano cualquiera. Ya se sabe como son los días de agosto en las oficinas: poca gente, poco o mucho trabajo, pero desde luego pocas ganas de hacerlo. Y allí estaban los que quedaban en la oficina de aquella nave en un polígono de la periferia, aburridos, cansados y con pocas ganas. Entre ellos, se encontraba Lucas (nombre ficticio), 30 años, 1.90, de complexión normal, pelo rubio, ojos marrones, vamos una persona que pasaría desapercib...

Diario de una puta esclava (1)

No quiero mi casa convertida en una pocilga. No quiero ver a mi puta como una mujer. Desde hoy tendrás la casa limpia, y vestirás y te comportaras como lo que eres. Una puta

*Traduzco literalmente unas notas que por extrañas casualidades del destino están en mi poder. Fue por voluntad de la propia autora de las notas que yo sea el depositario de ellas en este momento. No es propiamente un diario, sino anotaciones que hacia en notas o papeles sueltos, y que yo, al recibir, me he ocupado de ordenar. Repito por tanto que son trascripciones exactas de lo encontrado en estos escritos. Sorprenderá desde luego su publicación, tratándose de algo tan íntimo y confidencial. Bien, a...

La bola se hace grande (2)

Juan tuvo una noche loca y no quiere que se entere su novia Paula. Pero siempre hay alguien ahí para enredar las cosas...

Cuando me encaré con Paula estaba un poco asustado. "Tenemos que hablar", dijo ella. Y pasamos a nuestra habitación, nuestros compañeros estaban en el comedor, yo temía una reprimenda por lo del día anterior, seguro que ella pediría explicaciones… Pero ella no quiso casi ni hablar de eso. Por supuesto me preguntó que pasó, a qué hora llegué a casa… pero todo se arregló con solo comentar una gran fiesta, borrachera y cierre de after hours . Ella no cuestionó nada, solo se quejó un poco, pero nada...

Crónicas de Nihilistán (12, última entrega)

Aquí terminan las Crónicas de Nihilistán. Manchudo se ha convertido, definitivamente, en un perfecto esclavo de señora. Muchas gracias a todos los que han seguido esta serie.

Crónicas de Nihilistán (XII, última entrega)

  1. Esclavo de señora

En Nihilistán, todos los esclavos son muy esclavos.

Pero, sin duda, los esclavos personales lo son aun más.

Y si los esclavos de señor son muy esclavos, qué decir de los esclavos de señora.

Seguramente, no existe en Nihilistán una expresión más acabada de lo que es un esclavo, que el esclavo de señora.

Al cabo de tantos años de vivir a los pies de su ama, sirviéndola hasta en los menores detalles, un es...